jueves, 17 de mayo de 2018

Macri Blanco Villegas admitió que fue "muy optimista" al momento de imponerse metas y adelantó que va por más ajuste, al señalar que hay que acelerar el recorte del déficit

El ex hijastro de Flavia Palmiero brindó una conferencia de prensa en Olivos, luego de que el jefe de Gabinete, Marcos Peña, encabezara una reunión de la nueva mesa política para analizar la crisis económica y social.



Mugrizio Macri Blanco Villegas aseguró ayer a la tarde, en conferencia de prensa, que “están todos convocados para trabajar en un acuerdo”, al referirse a la posibilidad de que representantes de la CGT y el kirchnerismo sean invitados a un diálogo con el Poder Ejecutivo

Dijo que está "superada" la "turbulencia cambiaria" y destacó que “es importante reconocer el momento de nerviosismo que se vivió en varios sectores de la población, donde hubo miedo y angustia”.

Asimismo, el subnormal consideró que "lo más importante es reducir el déficit fiscal" y advirtió que “hay que acelerar esa tarea entre todos”.

Con respecto al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, sostuvo que "no nos va a condicionar y no se meten con nuestra legislación ni con el tipo de cambio" y afirmó que "no hay agendas ni negociaciones ocultas" con el organismo multilateral de crédito.

El idiota confeso agregó que los gobernadores y los legisladores nacionales de diferentes sectores políticos, junto al régimen fascista, tienen que “sentarse alrededor de una mesa y hacer un gran acuerdo para ver como hacemos para terminar esta historia del déficit fiscal con parches y mentiras”.

Destacó el “enorme esfuerzo que han hecho los argentinos en este tiempo, con lo cual evitamos una crisis que sí nos llevaba al 2001” y remarcó que “hoy estamos en una posición más sólida, pero con el mismo problema de fondo, que es el déficit fiscal”.

A modo de autocrítica, dijo que fue "muy optimista" al momento de imponerse metas frente a la situación del país, al tiempo que sostuvo que el “objetivo fundamental” de su régimen “sigue siendo bajar la inflación”, aunque “sin ponernos metas tan ambiciosas”, ya que “tiene que ser algo que tenga coherencia con la baja del déficit fiscal”

"No podemos pretender, si no bajamos el déficit, bajar la inflación a esa misma velocidad", añadió y advirtió que el régimen va a estar “muy atento a las avivadas” en los aumentos de precios al consumidor tras la subida del dólar. 

También aseguró que “el acuerdo con el FMI es para asegurar el futuro de los argentinos”; ratificó la continuidad de su equipo económico, destacó que actuó con “seriedad y profesionalismo” y consideró que encaró una negociación “profesional y técnica” con el FMI.

El pelotudo hijo de puta rechazó imponer las retenciones nuevamente como lo pide la oposición. "Hay que cobrar impuestos inteligentes que no destruyan el trabajo", dijo en tal sentido.

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