sábado, 29 de enero de 2022

Los domingos, Currín no se edita. Nos reencontramos con nuestrxs lectorxs el próximo lunes.

Alberto Fernández anunció un acuerdo con el FMI por la deuda: “Nos va a permitir crecer y cumplir con nuestras obligaciones”

El presidente señaló que "sufríamos un problema y ahora tenemos una solución" al llegar a un acuerdo por el pago de los 44 mil millones de dólares de deuda que tomó Miauricio Macri Blanco Villegas. Enumeró que el entendimiento no afecta a las jubilaciones, no implica una reforma laboral ni "saltos devaluatorios" y permite avanzar con la obra pública. "No nos impone llegar a un déficit cero", remarcó y ratificó que el arreglo será tratado en el Congreso.



Luego de una intensa semana y de meses de negociaciones, el presidente Alberto Fernández anunció ayer a la mañana  que "el Gobierno de la Argentina ha llegado a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional" para poder pagar la deuda por 44 mil millones de dólares que tomó de forma irresponsable el infame régimen de Miauricio Macri Blanco Villegas.

Si bien los detalles técnicos quedaron en manos del ministro de Economía, Martín Guzmán, el mandatario aseguró que "en comparación con otros anteriores que la Argentina firmó -y es bueno recordarlo- este acuerdo no contempla restricciones que posterguen nuestro desarrollo. No restringe, no limita ni condiciona, los derechos de nuestros jubilados que recuperamos en el año 2020. No nos obliga a una reforma laboral. Promueve nuestra inversión en obra pública. No nos impone llegar a un déficit cero. No impacta en los servicios públicos, no relega nuestro gasto social y respeta nuestros planes de inversión en ciencia y tecnología". 

"Además, vamos a poder acceder a nuevos financiamientos, precisamente, porque este acuerdo existe. Este entendimiento prevé sostener la recuperación económica ya iniciada", agregó.

Fernández comenzó el discurso, desde la Quinta de Olivos, remarcando que "gobernar es un ejercicio de responsabilidad", y apuntó que "sufríamos un problema, y ahora tenemos una solución. Teníamos una soga al cuello, una espada de Damocles, y ahora tenemos un camino que podemos recorrer. Sin acuerdo, no teníamos un horizonte de futuro. Con este acuerdo, podemos ordenar el presente y construir un futuro". Entre las características del entendimiento con el FMI, enumeró que el mismo "prevé que no habrá caída del gasto real y sí un aumento en la inversión de obra pública del Gobierno Nacional", e hizo hincapié en que "tampoco dispone saltos devaluatorios".

El Gobierno, después de idas y vueltas, finalmente decidió realizar el pago del primer vencimiento del año ante el organismo, equivalente a unos 731 millones de dólares de intereses. En un principio el pago había sido puesto en duda por el propio gobierno, lo que generó una respuesta del Fondo y una mejor predisposición para terminar de renegociar. De esta forma, el Poder Ejecutivo mantuvo la línea de cumplir con el pago de los vencimientos e intereses del acuerdo, que fue firmado por el abyecto régimen de la alianza de derecha Cambiemos en 2018.

"Sin el acuerdo, las posibilidades comerciales económicas y de financiación que nuestra Nación necesita estarían seriamente limitadas", destacó Fernández. En relación a la deuda multimillonaria contraída por el macrifascismo, el Jefe de Estado resaltó que "teníamos una deuda impagable que nos dejaba sin presente ni futuro y ahora tenemos un acuerdo razonable que nos va a permitir crecer y cumplir con nuestras obligaciones a través de nuestro crecimiento". 

"Este acuerdo no nos condiciona. Podremos actuar ejerciendo nuestra soberanía y llevar adelante nuestras políticas de crecimiento, desarrollo y justicia social. Es un acuerdo basado en la confianza del mundo en nuestras capacidades", aclaró luego.

A continuación, remarcó que "tenemos que crecer para poder pagar. De otro modo no era posible, y tampoco lo será". Para cerrar, Fernández resaltó que "confío en la Argentina", e invitó a "mirar hacia adelante sin olvidar el pasado". "Había un problema gravísimo y urgente y ahora tenemos una solución posible y razonable. Es tiempo de unirnos en las soluciones y no de dividirnos en los problemas", sostuvo el Presidente y al concluir destacó: "la historia juzgará quien hizo qué. Quién creo un problema y quién lo resolvió".

El acuerdo con el FMI, al Congreso

Debido a la Ley de Fortalecimiento de la Sostenibilidad de la Deuda Pública, que fue sancionada el 3 de marzo de 2021, todo programa de financiamiento u operación de crédito público realizados con el FMI, deberá pasar de forma obligatoria por el Congreso de la Nación. Sobre este tema, el mandatario dijo que "tengo confianza en la Argentina y en las líneas generales de este acuerdo que elevaré al Congreso de la Nación para su consideración. Necesitamos que apoyen este convenio y apelo así al compromiso nacional de todos y todas".

Hasta última hora del jueves, el ministro de Economía, Martín Guzmán, estuvo reunido en el Palacio de Hacienda con el representante argentino ante el FMI, Sergio Chodos, ultimando los detalles de lo que esta mañana anunció Fernández. El jueves también estuvieron reunidos con el presidente en Casa de Gobierno, a lo largo de la tarde, el Canciller, Santiago Cafiero y el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa.

Luego del discurso presidencial, el titular de la cartera, junto al Jefe de Gabinete, Juan Manzur, dieron detalles de lo acordado con el FMI, en una conferencia de prensa desde el Ministerio de Economía. De forma paralela, el directorio del organismo, según informó la agencia Bloomberg, mantiene una reunión virtual que tendrá el objetivo de informar sobre el estado de las negociaciones con nuestro país.

El discurso completo de Alberto Fernández

"Buenos días.

Quiero anunciarles que el Gobierno de la Argentina ha llegado a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

Gobernar es un ejercicio de responsabilidad.

Sufríamos un problema, y ahora tenemos una solución.

Teníamos una soga al cuello, una espada de Damocles, y ahora tenemos un camino que podemos recorrer.

Sin acuerdo, no teníamos un horizonte de futuro.

Con este acuerdo, podemos ordenar el presente y construir un futuro.

En comparación con otros anteriores que la Argentina firmó -y es bueno recordarlo- este acuerdo no contempla restricciones que posterguen nuestro desarrollo.

No restringe, no limita ni condiciona, los derechos de nuestros jubilados que recuperamos en el año 2020.

No nos obliga a una reforma laboral.

Promueve nuestra inversión en obra pública.

No nos impone llegar a un déficit cero.

No impacta en los servicios públicos, no relega nuestro gasto social y respeta nuestros planes de inversión en ciencia y tecnología.

Además, vamos a poder acceder a nuevos financiamientos, precisamente, porque este acuerdo existe.

Este entendimiento prevé sostener la recuperación económica ya iniciada.

Prevé que no habrá caída del gasto real y sí un aumento en la inversión de obra pública del Gobierno Nacional.

Tampoco dispone saltos devaluatorios.

Sin el acuerdo, las posibilidades comerciales económicas y de financiación que nuestra Nación necesita estarían seriamente limitadas.

Este acuerdo no nos condiciona. Podremos actuar ejerciendo nuestra soberanía y llevar adelante nuestras políticas de crecimiento, desarrollo y justicia social.

Es un acuerdo basado en la confianza del mundo en nuestras capacidades.

Tenemos que crecer para poder pagar. De otro modo no era posible, y tampoco lo será.

Teníamos una deuda impagable que nos dejaba sin presente ni futuro y ahora tenemos un acuerdo razonable que nos va a permitir crecer y cumplir con nuestras obligaciones a través de nuestro crecimiento.

Tengo fe en la Argentina.

Se que somos capaces de levantarnos y salir adelante.

Confío en el dinamismo de nuestras empresas, la fortaleza de nuestra industria, el compromiso de quienes trabajan, la valía de nuestras científicas y científicos, el talento de nuestros emprendedores, la enorme capacidad de nuestras pymes y en los sueños de nuestros jóvenes.

Creo en la Argentina.

Debemos crecer y debemos honrar nuestras obligaciones al mismo tiempo que hacemos una Argentina más justa, con más desarrollo, con mejor infraestructura. Seguiremos, también, la senda de ordenar las cuentas públicas sin condicionar nuestras políticas de justicia social.

Tengo confianza en la Argentina y en las líneas generales de este acuerdo que elevaré al Congreso de la Nación para su consideración. Necesitamos que apoyen este convenio y apelo así al compromiso nacional de todos y todas.

Hay futuro porque estamos afianzando este presente.

La historia juzgará quien hizo qué.

Quién creo un problema y quién lo resolvió.

Los invito a mirar hacia adelante sin olvidar el pasado.

Había un problema gravísimo y urgente y ahora tenemos una solución posible y razonable. Es tiempo de unirnos en las soluciones y no de dividirnos en los problemas.

Confío en la Argentina, confío en los argentinos y argentinas.

Gracias por su atención, buenos días".
Fuente: nota de Melisa Molina para Página/12

Martín Guzmán y Juan Manzur detallaron punto por punto el acuerdo con el FMI

El ministro de Economía precisó que el acuerdo que se firmará con el Fondo será de facilidades extendidas y no un stand by, como el suscripto en 2018. Los objetivos en cuanto a déficit fiscal, reservas, inflación y política monetaria. "No habrá ninguna reforma laboral ni privatización de empresas públicas ni afección a las jubilaciones", enumeró y aseguró que "no va a haber ningún salto cambiario".



El ministro de Economía, Martín Guzmán, y el jefe de Gabinete, Juan Manzur, dieron los detalles del acuerdo al que el gobierno nacional arribó con el Fondo Monetario (FMI), luego de una serie de largas y duras negociaciones. “Este acuerdo va a permitir que la Argentina continúe con el crecimiento”, por eso “no habrá ninguna reforma laboral ni privatización de empresas públicas ni afección a las jubilaciones”, garantizó el ministro.

"Se llegó al mejor acuerdo que se podía llegar", definió Guzmán antes de enumerar la letra de los detalles que serán enviados al Congreso Nacional.

Tal como lo había anticipado minutos antes el presidente Alberto Fernández, el acuerdo “no condicionará” las principales líneas de la política trazada por el gobierno del Frente de Todos, fundamentada en el crecimiento y desarrollo de la economía tras la debacle provocada por la abyecta administración de Miauricio Macri Blanco Villegas y la pandemia de coronavirus.

Los aspectos centrales y las cuestiones técnicas del acuerdo con el que la Argentina cumple sus obligaciones con el organismo fueron enumeradas por el titular del Palacio de Hacienda.

El monto del financiamiento es de 44 mil millones de dólares

“Plantemos tener el apoyo para refinanciar la deuda sin socavar las oportunidades de desarrollo de nuestra nación”, dijo y puntualizó. Para esto, “necesitamos el apoyo del mundo para lo que está por venir”.

“Nunca estuvo en discusión que se buscaba un programa de facilidades extendidas para refinanciar los vencimientos del programa stand by al que arribó el gobierno anterior”. "El monto del financiamiento es equivalente a ese acuerdo, alrededor de 44 mil millones de dólares”, detalló Guzmán.

Una vez que el programa esté aprobado por el Congreso y el Directorio del FMI, comenzarán los desembolsos. Para su devolución, "hay un cronograma de pagos definidos por el gobierno anterior" y "vamos a contar con dinero para pagar lo que venza y acumular reservas por el remanente".

Las claves del acuerdo: fiscal, monetario, inflación y crecimiento

El marco general tiene cuatro bloques: el fiscal, el monetario, el de la inflación y el de políticas de crecimiento. Tendrá una duración de dos años y medio y aún hay que trabajar los memorándum de entendimiento que se elaborarán en las próximas semanas.

Cómo se va llegar al déficit fiscal 0

Desde el punto de vista lo macroeconómico, está el subloque fiscal: “Se logró que la Argentina pueda llegar a un acuerdo sin políticas de ajuste fiscal”, dijo Guzmán.

En este sentido, se buscará una reducción gradual del déficit fiscal: se proyecta un déficit primario de 2,5 para 2022 del PBI; de 1,3 para 2023 y de 0,9 para 2024.

Con el objetivo de fortalecer la política fiscal, Guzmán informó que el Gobierno se abocará a "atacar los problemas de lavado de dinero y evasión".

"No habrá ninguna reforma laboral ni privatización de empresas públicas ni afección a las jubilaciones", aseguró el titular del Palacio de Hacienda.


Asistencia del Tesoro y tasas de interés

En el bloque monetario y financiero, “va a haber una reducción gradual pero decidida de la asistencia monetaria del Banco Central al Tesoro nacional”. En 2022 el financiamiento al tesoro será del 1 por ciento, del 0,6 del PBI en 2023 y deberá llegar a cero en 2024.

En materia de política monetaria se acordó un marco que tiene como objetivo diseñar "una estructura de tasas de interés reales que redunde en valores positivos".

En el frente financiero “se va a continuar con la reconstrucción del mercado de deuda pública en moneda nacional”. “Hoy el gobierno nacional tiene la capacidad para hacerlo”, aseguró.

Inflación y emisión

En materia de inflación, se acordó un “bloque integral” que interpreta ese problema como "un fenómeno multicausal". También se buscará "mantener el rol coordinador del Estado para generar las expectativas del mercado". El rol de las políticas de control precios es fundamental y van a tener un rol importante en el esquema inflacionario. El programa durará dos años y medio y los acuerdos serán conversados entre el gobierno y los empresarios.

El esquema fiscal monetario: “Mejorar el perfil de financiamiento de las políticas públicas” que apuntará a “reducir la emisión monetaria”.

Devaluación y reservas

El funcionario subrayó que "no va a haber ningún salto cambiario". A lo que se apunta es a "medidas que favorezcan el ingreso de divisas para el desarrollo".

El Gobierno "va a seguir en la línea que se planteó y seguirá la política de acumulación de reservas. Se plantea una meta de crecimiento de las reservas de 5 mil millones de dólares para 2022". Para esto habrá regulaciones en la cuenta financiera para desalentar el ingreso y salida de capitales especulativos.

El fracaso del programa de Macri Blanco Villegas y el FMI

Por otra parte, Guzmán recordó que fue la alianza de derecha Cambiemos (hoy devenida en Juntos por el Cambio) el responsable de tomar un “préstamo récord” de 57 mil millones del que se tomaron casi 45 mil millones de dólares. “El programa fue un profundo fracaso” para la Argentina, algo que “reconoció el propio FMI”.

“Ese dinero se utilizó para financiar la salida de capitales en la Argentina y pagar deuda que estaba en situación de insostenibilidad, dejó una situación con una carga de deuda aplastante para las posibilidades de desarrollo y en una condición de dependencia” al país.

En este contexto, lo que el gobierno del Frente de Todos buscó fue “sanar el presente tan fuerte que tenía la Argentina” y “sembrar condiciones para construir futuro”.

Apoyo de los gobernadores

Manzur manifestó que no tenía dudas del "acompañamiento de la totalidad de los gobernadores y gobernadoras de la Argentina" al entendimiento con el Fondo.

Durante la conferencia, el jefe de Gabinete destacó que el acuerdo se arribó “después de mucho trabajo e intercambios de propuesta y borradores” y cuestionó a la administración de Juntos por el Cambio, que contrajo la deuda.

“Lo que hizo el gobierno del ex presidente Macri es una tragedia para la Argentina, endeudó irresponsablemente al país cercenándolo de propuestas y de un futuro mejor”, sentenció.

El FMI confirmó el acuerdo con la Argentina sobre la deuda

“El personal técnico del FMI y las autoridades argentinas han llegado a entendimientos sobre políticas clave", indicó el organismo y agregó que continuará el trabajo en las próximas semanas para alcanzar "un acuerdo final de un programa que estará sujeto a la aprobación del Directorio", agrega.


Luego del anuncio del presidente Alberto Fernández y las precisiones técnicas ofrecidas por el ministro de Economía Martín Guzman, desde el Fondo Monetario Internacional confirmaron el acuerdo alcanzado con la Argentina sobre el entendimiento para respaldar los nuevos términos de la deuda.

“El personal técnico del FMI y las autoridades argentinas han llegado a entendimientos sobre políticas clave como parte de sus discusiones en curso sobre un programa respaldado por el FMI”, afirmaron desde el organismo en en un comunicado.

Según los detalles punteados por el Fondo, el personal técnico avaló el “sendero de consolidación fiscal” que “mejoraría de manera gradual y sostenible las finanzas públicas y reduciría el financiamiento monetario”.

“Es importante destacar que también permitiría aumentar el gasto en infraestructura y ciencia y tecnología y protegería programas sociales focalizados. Acordamos que una estrategia para reducir los subsidios a la energía de manera progresiva será fundamental para mejorar la composición del gasto público”, agregaron.

Sobre las tasas de interés aclararon que serán “reales” para “respaldar el financiamiento interno”. “Hemos llegado a un entendimiento sobre el marco para la implementación de la política monetaria como parte de un enfoque múltiple para enfrentar la alta y persistente inflación. Este marco tiene como objetivo asegurar tasas de interés reales positivas para respaldar el financiamiento interno y fortalecer la estabilidad”, remarcaron.

“También hemos acordado que el apoyo financiero adicional de los socios Internacionales de Argentina ayudaría a reforzar la resiliencia externa del país y sus esfuerzos para asegurar un crecimiento más inclusivo y sostenible”, dijeron sobre la posibilidad de acceder a financiación de otros organismo externos.

El comunicado se dio a conocer luego de una reunión virtual convocada en Washington para las 8 de la mañana, en la que el FMI terminó de cerrar su postura. 

"El Gobierno de la Argentina ha llegado a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional", anunció ayer a la mañana Fernández. El mandatario adelantó que en comparación con acuerdo anteriores, este entendimiento "no contempla restricciones que posterguen nuestro desarrollo”, afirmó en el sentido que no obliga una reforma laboral ni impone un déficit cero. “No impacta en los servicios públicos, no relega nuestro gasto social y respeta nuestros planes de inversión en ciencia y tecnología", agregó.

Acceder al tuit
El tuit de Kristalina Georgieva tras 
el acuerdo de Argentina con el FMI

La titular del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, ponderó ayer al mediodía el acuerdo alcanzado con el Gobierno argentino y definió que se llegó a "un entendimiento sobre políticas clave" durante las negociaciones entre el personal técnico del Fondo y las autoridades locales.

Georgieva dijo estar "entusiasmada" porque ambas partes se pusieron de acuerdo en un programa que permitirá "abordar los desafíos actuales como la inflación y asegurar un crecimiento más inclusivo y sostenible para el pueblo argentino".

La directora gerente del FMI compartió el comunicado publicado por el organismo minutos antes, ese que confirma el acuerdo de facilidades extendidas suscripto con el Gobierno argentino. 

El documento aclara que este nuevo entendimiento para renegociar la deuda de U$S 44.000 millones contraída durante el macrifascismo permitirá una mejora “gradual y sostenible de las finanzas públicas” y que incluirá la "reducción de subsidios a la energía de manera progresiva".

Tras la confirmación del acuerdo, Argentina le pagó al FMI el vencimiento de U$S 731 millones

Fuentes oficiales confirmaron que la Argentina le pagó al FMI el vencimiento de U$S 731 millones que debía abonar ayer, evitando así el default y en el día en que anunció un acuerdo con el organismo para afrontar la deuda de U$S 44.000 millones asumida durante la infame gestión del hijo bobo de FrancoMacri.


Finalmente Argentina le pagó al FMI el vencimiento de U$S 731 millones que debía abonar ayer, evitando así el default y en el día en que anunció un acuerdo con el organismo para afrontar la deuda de U$S 44.000 millones asumida durante el abyecto régimen de Miauricio Macri Blanco Villegas.

Ayer nuestro país debía hacer un pago a dicho organismo por 730 millones de dólares y el martes próximo hay un segundo compromiso por 360 millones de dólares que podrían quedar absorbidos en caso de una postergación de los desembolsos producto del acuerdo.

En las primeras horas de la madrugada de ayer los técnicos del staff del FMI y el equipo económico que lidera Martín Guzmán finalmente llegaron a un acuerdo.

Una de las trabas más importantes era la reticencia del Fondo a ser “flexibles” con el ajuste fiscal y, en este punto, Argentina no estaba dispuesta a ceder. Luego de arduas negociaciones se llegó a acordar una reducción del desequilibrio fiscal a 2,5% para el año en curso, 1,9% en 2023 y 0,9% en 2024.

El acuerdo, finalmente, no será un Extended Fund Facility (EFF) de diez años sino que se tratará de un programa de dos años y medio, del tipo Stand By, como el que firmó el gobierno de Mauricio Macri en 2018.

Cómo se negoció con el FMI: la trastienda del acuerdo

Hace quince días se venía evaluando no pagar el vencimiento de 730 millones, por el nivel de reservas y la pulseada por el déficit. El presidente, Estados Unidos y el gasto. El detrás de escena de las últimas semanas de Argentina y el Fondo Monetario Internacional.


El jueves, cerca de la una de la madrugada, se cerraron las computadoras del ministro de Economía, Martín Guzmán, y sus negociadores, con el acuerdo de la deuda con el Fondo Monetario (FMI) formalmente cerrado. La postal que el funcionario subió a su cuenta de Instagram, en la que se lo ve con el negociador argentino ante el organismo, Sergio Chodos, coincidió con las pinceladas finales de un pacto que no tuvo una medianoche intensa, sino más bien tres semanas más que calientes en la disputa entre Argentina y el Fondo. 

En esos días, siempre estuvo latente la posibilidad de no pagar el vencimiento de 730 millones de dólares de este viernes, dado que la entidad no cedía en el pedido de ajuste del déficit. Ese "fueron negociaciones durísimas" expresado por Guzmán es una foto de un proceso arduo que exploró, en tándem, la vía política y la de los números.

En los tramos finales, contaron fuentes de la negociación, el presidente Alberto Fernández se mantuvo en contacto permanente con Guzmán, vía telefónica. Hubo incluso, en los días previos, charlas del presidente y también el ministro con la titular del FMI, Kristalina Georgieva. El jueves a la noche, Fernández estuvo reunido con el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y se sumó Guzmán por teléfono, para evaluar los avances. "Hay que garantizar el incremento de gasto real" fue la premisa que siempre manejó el Gobierno y es, lo que en las últimas tres semanas, trabó el acuerdo.

El FMI quería no sólo una mayor contracción del gasto, sino además que el sendero fuera variable, es decir, que la curva no sea una línea del gasto en ascenso, sino que existiera la posibilidad que esa tendencia se quebrara. "Llegábamos a una señal o se complicaba mucho la negociación", consideró una fuente oficial que siguió el tema. La condición que puso Argentina fue que pagaría sólo si el sendero era consistente y posible en su cumplimiento. Es que el Banco Central (BCRA) debía debitar de sus arcas más de 1000 millones de dólares (si se suma el vencimiento del 1º de febrero) sobre un total de reservas líquidas de algo más de 2000 millones. Es decir, sin señales de acuerdo, era difícil pagar. Hasta último momento del jueves, de hecho, se esperaba que la política subiera o bajara el pulgar a esa posibilidad. Pero llegó finalmente el acuerdo y se pagó.

"Nunca estuvo en la cabeza el default", sintetizan desde el Gobierno y aseguran que ese factor siempre estuvo contemplado entre las tres patas fuertes de la alianza, el presidente, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y Massa. Naturalmente, todos tienen diferencias sobre el manejo de la economía y respecto a lo que es o no un ajuste, pero ninguno manifestó incumplir con la deuda en las horas decisivas.

Chodos, que todos suponían estaba en Estados Unidos negociando, llegó al país el miércoles con una carpeta y el reporte de los avances y problemas que debatió con los técnicos de Georgieva en Washington. Unos días antes, estuvo en una reunión allí con el canciller Santiago Cafiero, tras el encuentro del diplomático con Antony Blinken, secretario de Estado del gobierno de Joe Biden. Esas reuniones con funcionarios estadounidenses fueron una de las claves del destrabe de las negociaciones. "No nos ahorramos ni una munición", aseguran fuentes de Presidencia para describir el scrum para llegar a un acuerdo.

En las horas finales, fue casi un diálogo bilateral de Guzmán y Julie Kozak, la estadounidense jefa de la misión del FMI y el cuadro con el que el Gobierno construyó una mejor relación de entendimiento en el trabajo diario. Con ella se cerró el sendero fiscal. "Estamos satisfechos, hemos pasado la peor parte", se escuchó el jueves a última hora en los pasillos de Hacienda. Uno de los más memoriosos laderos de Guzmán recordó además que "es la primera vez que el FMI no obliga a un país a reformas estructurales para las grandes mayorías". Y le comentó a un colega que trabajaba en el texto final que "Macri hizo una reforma jubilatoria sin el FMI y nosotros estamos recomponiendo eso con el Fondo en el medio y pagando la deuda".

Más allá de esto, se coordinó a nivel discursivo centrar las declaraciones en lo que viene, más que en pegarle con saña al macrifascismo. "Lo vamos a recordar y marcar, pero nadie negocia para atrás", sintetizaron y concluyeron que "lo relevante es que se va a poder seguir gastando en terminos reales incrementalmente". También fue parte de las charlas la cuestión de las revisiones trimestrales. El Gobierno marcó que "no nos gustan", pero la idea de rebotar un acuerdo por esa cuestión era imposible de tomar en esta instancia. Además, en el entorno de Guzmán explican que "una cosa es una misión para lo que no podes cumplir, como ocurrió en el pasado, y otra para lo que sabemos que podemos hacer".
Fuente: nota de Leandro Renou para Página/12

Los empresarios celebraron el acuerdo con el FMI: “Permitirá desarrollo y una inserción internacional inteligente”

El Grupo de los 6 dijo que el convenio es “fundamental para lograr objetivos como el fortalecimiento del crédito público, el acceso a financiamiento nacional e internacional para el sector privado y la generación de empleo”.


Cuando aún no había terminado la conferencia de prensa del ministro Martín Guzmán, y minutos después de las palabras del presidente Alberto Fernández, quien desde Olivos confirmó el principio de acuerdo con el Fondo Monetario, comenzaron a llegar las adhesiones del empresariado local.

“En virtud del principio de acuerdo entre Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el G6 manifiesta su apoyo a las gestiones que permitan promover el progreso de Argentina y el cumplimiento de los compromisos asumidos, como herramienta para lograr el desarrollo socioeconómico del país y una inserción internacional inteligente”, destaco el llamado Grupo de los 6, compuesto por la UIA, la Suciedad Rural, ADEBA (bancos), la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, la Cámara de la Construcción y la Cámara de Comercio (CAC).

“La concreción de un acuerdo será fundamental para lograr objetivos como el fortalecimiento del crédito público, el acceso a financiamiento nacional e internacional para el sector privado, la generación de empleo, desarrollo federal y pyme, entre otros”, destacaron los empresarios que representan al establishment local.

Además del comunicado conjunto, la CAC envió su propio texto sobre el tema. Desde la entidad de los empresarios del Comercio afirmaron que “aboga por que, en las próximas semanas, partiendo de un diagnóstico integral de la situación argentina y mediante la buena predisposición de las partes involucradas, se definan adecuadamente los detalles del entendimiento. Asimismo, consciente de que más allá de la cuestión de la deuda el país registra múltiples falencias que resulta necesario abordar si se aspira a lograr el progreso económico y social, la CAC manifiesta su plena vocación de colaborar con las autoridades en dicha tarea –en el marco del Consejo Económico y Social o en otros ámbitos que se determinen– y convoca a los diversos actores del quehacer nacional a ser parte de ese proceso”.

Por su parte, desde la Bolsa de Cereales destaca que el acuerdo como herramienta para “refinanciar las deudas y equilibrar el déficit al 2025″.

“Sería importante que este tipo de entendimientos permita implementar políticas necesarias para recuperar un modelo de crecimiento inclusivo basado en mayor producción, exportaciones crecientes con más valor agregado e inversión privada sostenible en el tiempo. Creemos que una política de estabilidad macroeconómica debe estar acompañada de un programa de desarrollo económico a través de estímulos e incentivos que promuevan la inversión productiva que permitan a nuestro país superar la profunda crisis que atraviesa”, aseguraron.

Pymes

Desde Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), en tanto, señalaron que el acuerdo será una “oportunidad para el crecimiento”. El titular de la entidad, Alfredo González, sostuvo que “el anuncio que realizó el jefe de Estado nos permite pensar en un entendimiento que no postergue las posibilidades reales de las pequeñas y medianas empresas”.

“La Argentina necesitaba alcanzar un acuerdo con el organismo de crédito para lograr un horizonte de certidumbre en el marco de una profunda crisis económica que atraviesa el país”, agregó González poco después del discurso presidencial. Al mismo tiempo, la entidad gremial empresaria manifestó que “el país se encuentra una vez más ante la posibilidad de unir esfuerzo para salir de la crisis, con un camino de diálogo, entendimiento y compromiso de todos los sectores y el acuerdo con el Fondo constituía un paso imprescindible en ese sentido”.

El presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato, respaldó también el anuncio y sostuvo los términos del entendimiento generan las condiciones para apuntalar el desarrollo de la actividad productiva de las fábricas argentinas, iniciado con el modelo de reindustrialización nacional.

“Este acuerdo, que dejó de lado las viejas recetas de reformas estructurales, permitirá mantener el crecimiento de una actividad que durante el 2021 mostró la capacidad de generación de riquezas para el país, con eje en las pymes industriales que rejuvenecieron y pudieron generar empleo, además de producción”, afirmó Rosato.

“Las Pymes necesitamos de entornos que nos permitan pensar a mediano y largo plazo. En el país quedó demostrado que estamos en condiciones de dar respuestas inmediatas a los estímulos de crecimiento, pero el desarrollo llegará de la mano de las inversiones y el financiamiento. Este acuerdo sienta las bases para una segunda etapa de desarrollo en materia productiva”, agregó.

El industrial salteño José Urtubey consideró como “muy importante” el anuncio. “Permitirá reinsertarnos financieramente al mundo y profundizar las políticas de desarrollo productivo. El Congreso Nacional sin dudas debe acompañar estos términos acordados para darle validez al entendimiento. Argentina debe pasar del asistencialismo al pleno empleo y bajar la informalidad, y para ello este paso logrado es sin dudas un punto de inflexion positivo”, expresó.

Desde la Fundación Pro Tejer manifestaron su apoyo al Gobierno Nacional, con un acuerdo acuerdo que, dijeron, se llevó adelante “lejos de las limitaciones que históricamente nos han llevado a un fuerte ajuste económico, que recae sobre toda la sociedad, y que han comprometido nuestro desarrollo productivo. La industria nacional ya se recuperó a niveles pre-pandemia y resulta fundamental continuar creciendo para poder ampliar las capacidades instaladas, mejorar la productividad y lo más importante, seguir generando empleo de calidad en todo el país. Tenemos claro que la Argentina saldrá adelante con más industria, produciendo y trabajando”.

Juntos por el Cambio aseguró que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional es positivo pero espera los detalles

En un comunicado de sólo tres párrafos, la Mesa Nacional de la alianza opositora de derecha afirmó que se trata de un “un primer paso para no seguir generando incertidumbre”. No obstante, planteó que aguarda la letra chica para poder analizarla en el Congreso.


La Mesa Nacional de Juntos por el Cambio consideró ayer a la tarde “positivo” el acuerdo del Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) porque “evita un costoso default” y lo calificó de “primer paso para no seguir sembrando incertidumbre en la sociedad”.

“Aguardaremos la continuidad de las negociaciones que deriven en detalles de un acuerdo definitivo, que luego será evaluado en el Congreso, tal como establece la ley que todos hemos aprobado”.

El comunicado de prensa difundido tiene apenas tres párrafos y fue redactado luego de un Zoom que mantuvieron los integrantes de la conducción nacional de la coalición y que contó con la participación de tres economistas vinculados con el espacio opositor: el ex ministro de Economía Hernán Lacunza, el diputado nacional del PRO Luciano Laspina y Eduardo Levi Yeyati.

En la reunión no hubo diferencias: luego de escuchar el informe de los economistas sobre el acuerdo anunciado por el Gobierno, cada uno coincidió en que es una buena noticia que el país no haya entrado en default, aunque también advirtieron que habrá que esperar los detalles del entendimiento con el Fondo cuando el texto sea debatido por el Congreso.

Con un Miauricio Macri Blanco Villegas en silencio y Patricia Bullrich Luro Pueyrredeón compartiendo el apoyo al acuerdo, los “halcones” esta vez estuvieron de acuerdo con las “palomas”, en un gesto clave para que el Gobierno pueda exhibir ante el FMI que la oposición respaldó los anuncios de ayer a la mañana.

Estuvieron en el Zoom, además del hijo bobo de Franco Macri y la ex montonera entregadora de compañeros, los radicales Gerardo Morales, Rodolfo Suárez, Alfredo Cornejo, Luis Naidenoff, Mario Negri y Martín Lousteau; los dirigentes del PRO Horacio Rodríguez Larrata, Humberto Schiavoni y Cristian Ritondo, y los representantes de la Coalición Cínica Maximiliano Ferraro, Juan Manuel López y Maricel Etchecoin.

Ayer a la mañana, luego del discurso presidencial, las autoridades del PRO y de la Coalición Cínvica prefirieron evaluar más en profundidad los anuncios antes de dar una opinión, mientras que desde la UCR se registraron las primeras posiciones de la oposición en favor del acuerdo con el Fondo. “Es un primer paso positivo ya que con el default hubiera sido negativo para nuestra economía”, dijo el fascista presidente del Comité Nacional del radicalismo, Gerardo Morales, en su cuenta de Twitter.

“Oportunamente el Congreso tratará los términos del acuerdo; reivindico la actitud responsable de la oposición en un tema clave para la vida de los argentinos”, agregó el carcelero de Milagro Sala.

El radical Alfredo Cornejo, jefe del interbloque de senadores de Juntos por el Cambio, también opinó desde las redes sociales: “Todo lo que lleve a acordar con los organismos internacionales es una buena noticia. Se podría haber evitado un año de angustia, pero la obsesión por el relato del kirchnerismo nos perjudicó a todos. Ahora tenemos que ver la letra chica del acuerdo”.

Su correligionario Luis Naidenoff, titular del bloque de senadores de la UCR, señaló que “el anuncio del acuerdo con el Fondo es una buena señal” y destacó: “Siempre sostuvimos que era necesario lograr un entendimiento. Ya habrá tiempo para discutir sobre las responsabilidades del endeudamiento. Ahora el Parlamento tiene que analizar las implicancias del acuerdo para el país”.

Para el diputado nacional de la UCR Facundo Manes “es una buena noticia que después de dos largos años estemos llegando a la recta final de las negociaciones con el FMI”. Advirtió, sin embargo, que “además del acuerdo con el FMI y el apoyo de las potencias, necesitamos una visión integral, voluntad política y sentido común en el frente interno”. En ese sentido, afirmó que “no tener un plan económico claro pone en riesgo una discusión seria sobre el futuro del país”.

Martín Tetaz, diputado del radicalismo y economista, dijo que se “alegra de que haya acuerdo (con el FMI) porque pavimenta una hoja de ruta, aunque después el debate es si esa hoja de de ruta es creíble o no”, y destacó que “se plantea que el objetivo es llegar a 2024 con un déficit del 0,9%, que está incluso por arriba del que había cuando el Gobierno asumió, que fue del 0,4″.

Para el legislador, se prevé esa meta “sin financiamiento monetario, con lo cual tiene que crecer el financiamiento en el mercado local”, algo que consideró “demasiado optimista” ya que “van a seguir las condiciones del cepo y las restricciones para compra de otros activos y es difícil un crecimiento a largo plazo”. “El plan monetario del Gobierno luce razonable, pero poco probable”, sintetizó.

Resaltó, de todas formas, que “un gran punto positivo del acuerdo” anunciado “es el plazo de 10 años para pagar, con cuatro años de gracia, el punto que destrabará más el horizonte financiero” del oficialismo. “El logro también es la recomposición de reservas -dijo-. Al ser un programa por los 44.000 millones totales nos devuelven todo lo pagado, y de esa forma recuperamos 5000 millones de dólares, que es con lo que el Gobierno planea recuperar las reservas desde 2022″.

Acerca del respaldo de Juntos por el Cambio en el Congreso al acuerdo con el FMI, Tetaz indicó que “es importante que el programa no incluya aumento de impuestos porque (si hubiera sido al revés) nos hubiera impedido apoyarlo, ya que una de las condiciones que habíamos planteado, y nos escucharon, por lo visto, es que no hubiera aumento de impuestos”.

“Para aprobar el programa, vamos a pedir precisiones sobre las cuestiones tarifarias y cambiarias. Si esas precisiones son relativamente satisfactorias, seguramente acompañaremos”, anticipó.

Por su parte, desde el sector del PRO de Patricia Bullrich Luro Pueyrredón se sumó la opinión del diputado nacional Gerardo Milman desde su cuenta de Twitter: “Hace dos años, nosotros hubiésemos tardado cinco minutos en hacer un mejor acuerdo. El Gobierno hizo sufrir innecesariamente a la Argentina todo este tiempo. La pregunta es: Y el kirchnerismo, ¿dónde está ahora?

El diputado nacional del PRO Federico Angelini, vicepresidente del partido a nivel nacional, celebró “que haya un principio de acuerdo con el FMI y que no hayan prosperado las ideas destructivas de Cristina Kirchner y de parte del Frente de Todos”, aunque destacó que “ahora lo más importante es que el Gobierno explique cómo va a alcanzar las metas que se propone porque hasta el momento los enunciados indican únicamente los objetivos macroeconómicos”.

“Por lo que se entiende, al menos inicialmente, de la presentación del ministro Guzmán, el proceso de negociación con el FMI está pateando la responsabilidad para el 2024, es decir, para el próximo gobierno, por lo que el actual Poder Ejecutivo se deslinda de asumir los grandes compromisos, más allá de las metas esgrimidas”, dijo el legislador.

Los mercados reaccionaron rápidamente al anuncio del acuerdo con el FMI

Bajaron el dólar libre y el mep. Los bonos y acciones subieron hasta 8% en Wall Street y cayó fuerte el riesgo país.


Las reacciones del mercado tras el anuncio del Gobierno sobre un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) fueron alentadoras. Al mediodía, el dólar blue registraba una caída significativa, las acciones argentinas subieron hasta un 9 por ciento y la bolsa porteña avanzó casi el 4.

Luego del mensaje del presidente Alberto Fernández y los detalles brindados por el ministro de Economía, Martín Guzmán, el dólar blue experimentó una caída de 6,5 pesos. Se comercializó en 216 pesos por unidad para la venta, después de haber alcanzado el jueves un pico máximo de 223.

En tanto, el dólar oficial mantuvo su ajuste suave, tal como lo anticipó el ministro Guzmán. El primer precio operado en el segmento mayorista del dólar fue de 104,83 pesos por unidad.

En tanto, el índice Merval de Bolsas y Mercados Argentinos (BYMA) subía 4,7 por ciento. Y los bonos salieron de las bajas registradas durante la incertidumbre de los días previos.

Los reestructurados en 2020 subían hoy 8 por ciento en la apertura del mercado. El Global 29 avanzaba un mejora del 7 por ciento; y el Global 30 aumentaba 7,4. Mientras que el Global 35 lo hacía en más de 8 por ciento; el Global 38, en 6,1; el Global 41, en 7,1 y el Global 46 superaba el 8 por ciento.

La familia de los bonos en dólares AL29, 30, 35, 38 y 41 registraban subas más moderadas. Antes de la apertura del mercado, ya habían mostrado un comportamiento al alza previo al anuncio oficial del acuerdo entre la Argentina y el Fondo para restructurar una deuda de alrededor de 44.500 millones de dólares.

Coronavirus en Argentina: se registraron ayer 305 muertes y 63.884 nuevos casos

De esta manera, el total de infectados desde el inicio de la pandemia asciende a 8.271.636, mientras que los fallecimientos suman 120.657.


El Ministerio de Salud de la Nación informó ayer a la tarde que en las últimas 24 horas se registraron 63.884 nuevos contagios de coronavirus y 305 muertes. De esta manera concluyó una semana en la que se evidenció un descenso de infectados respecto de la semana pasada, cuando el promedio de casos diarios se ubicó por encima de los 100 mil, aunque por el contrario se incrementó el número de decesos: antes de ayer se reportaron 334 fallecimientos, la mayor cifra en más de cinco meses.

Con estos datos, el total de casos positivos desde el inicio de la pandemia se elevó a 8.271.636, mientras que las víctimas fatales suman 120.657.

Del jueves al viernes se realizaron 111.387 testeos. Como resultado, la tasa de positividad registrada es del 57,35%. Es decir: casi 6 de cada 10 que se testaron dieron positivo de coronavirus.

De las 305 muertes reportadas, 165 fueron hombres (57 de la provincia de Buenos Aires, 14 de la ciudad de Buenos Aires, 1 de Catamarca, 14 de Chaco, 2 de Chubut, 5 de Corrientes, 12 de Córdoba, 2 de Entre Ríos, 1 de Formosa, 2 de Jujuy, 1 de La Pampa, 4 de Mendoza, 6 de Misiones, 4 de Río Negro, 11 de Salta, 6 de San Juan, 1 de San Luis, 3 de Santa Cruz, 8 de Santa Fe, 3 de Santiago del Estero, 2 de Tierra del Fuego y 6 de Tucumán); y 140 fueron mujeres (51 de la provincia de Buenos Aires, 19 de la piudad de Buenos Aires, 7 de Chaco, 1 de Chubut, 9 de Corrientes, 7 de Córdoba, 6 de Formosa, 2 de Jujuy, 2 de Mendoza, 6 de Misiones, 1 de Neuquén, 2 de Río Negro, 5 de Salta, 4 de San Juan, 4 de San Luis, 1 de Santa Cruz, 7 de Santa Fe, 4 de Santiago del Estero y 2 de Tucumán).

De acuerdo al parte epidemiológico, de momento, en Argentina hay 2.945 personas con coronavirus internadas en terapia intensiva. Son 109 más que ayer. El porcentaje de ocupación de camas a nivel nacional es del 49,9% y en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) del 48,3%.

De los 63.884 nuevos contagios reportados, más de la mitad se concentran en provincia de Buenos Aires (27.911 casos), CABA (6.666) y Córdoba (6.267). Entre las tres jurisdicciones acumularon 40.844 casos, cifra que representa el 63,93% del total. Para el resto del país, los números fueron los siguientes: Catamarca 753 contagios, Chaco 1.304, Chubut 665, Corrientes 1.400, Entre Ríos 1.343, Formosa 1.429, Jujuy 984, La Pampa 805, La Rioja 209, Mendoza 1.861, Misiones 315, Neuquén 974, Río Negro 775, Salta 715, San Juan 1.088, San Luis 844, Santa Cruz 418, Santa Fe 4.608, Santiago del Estero 276, Tierra del Fuego 393 y Tucumán 1.881.

El detalle del total de casos acumulados por distrito indica que la provincia de Buenos Aires suma 3.208.526; la CABA, 930.013; Catamarca, 79.169; Chaco, 155.777; Chubut, 108.158; Corrientes, 120.224; Córdoba, 894.176; Entre Ríos, 185.545; Formosa, 96.412; Jujuy, 100.785; La Pampa, 95.352; La Rioja, 42.135; Mendoza, 253.002; Misiones, 47.559; Neuquén, 159.054; Río Negro, 135.579; Salta, 149.006; San Juan, 136.879; San Luis, 128.604; Santa Cruz, 83.534; Santa Fe, 686.200; Santiago del Estero, 122.430; Tierra del Fuego, 42.716 y Tucumán, 310.801.

Se incluyen casos existentes en las Islas Malvinas según información de prensa (debido a la ocupación ilegal del Reino Unido, Gran Bretaña e Irlanda del Norte no es posible contar con información propia sobre el impacto de la Covid-19 en esa parte del territorio argentino).

La mitad de los vehículos de alta gama en un parador de Pinamar tenían deudas

Agentes de ARBA controlaron un total de 234 vehículos de lujo. De aquellos registrados en territorio bonaerense, el 50% de sus titulares poseía deudas de Automotores, Inmobiliario o Ingresos Brutos.


Un operativo conjunto de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) junto con el Ministerio de Transporte y la Policía bonaerense en la exclusiva playa de La Frontera, en Pinamar, permitió detectar que el 50% de los contribuyentes controlados, que eran titulares de vehículos de alta gama, registraban deudas impositivas.

 “A través de esta fiscalización enfocada en sectores de mayor capacidad contributiva, notificamos deudas correspondientes a distintos impuestos bonaerenses y logramos que se firmen compromisos de pago por más de $ 32 millones”, destacó en un comunicado el director de ARBA, Cristian Girard.

“Recuperar esos recursos es fundamental para consolidar un Estado presente e igualador, como el que puso en marcha el gobernador Axel Kicillof desde su asunción, hace poco más de dos años. Vamos a continuar con estas acciones que buscan reforzar los controles y mejorar la cultura tributaria en sectores de altos ingresos que, cuando incumplen con sus impuestos, agudizan la desigualdad”, aseguró.

Durante la fiscalización realizada en La Frontera, agentes de ARBA controlaron un total de 234 vehículos de lujo, de los cuales la mitad de ellos pertenecía a personas de otras provincias o de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En tanto, de aquellos registrados en territorio bonaerense, el 50% de sus titulares poseía deudas de Automotores, Inmobiliario o Ingresos Brutos. 

Entre esos contribuyentes que adeudaban impuestos, algunos abonaron en el momento, mediante pago electrónico, un total de $ 102.000; otros suscribieron planes de regularización por $ 108.000; mientras que el resto firmó actas de pago, con el compromiso de cancelar deudas en los próximos días por un monto global de $ 32,7 millones.

Respecto de las acciones conjuntas que la provincia realizó en Pinamar, Girard subrayó que “es muy importante que el Estado se muestre activo y con decisión para fiscalizar los incumplimientos tributarios de quienes más tienen y, al mismo tiempo, verificar que se cumplan las normas de seguridad vial para que podamos disfrutar de esta temporada de verano sin lamentar accidentes”.

Mientras ARBA fiscalizaba a contribuyentes con vehículos de alta gama, el Ministerio de Transporte conducido por Jorge D'Onofrio se centraba en la circulación de cuatriciclos, fourtrax, todoterrenos y vehículos UTV, que han provocado diversos incidentes en la playa, con el objetivo de corroborar la documentación habilitante de esos rodados y las condiciones de seguridad vial en el lugar. 

La zona de La Frontera, al norte de Pinamar, es uno de los sitios más exclusivos de la costa. Es un lugar aislado, con un paisaje privilegiado de médanos y playa, al que quienes veranean en la región suelen concurrir con camionetas, vehículos 4×4, cuatriciclos, así como embarcaciones deportivas, lanchas y motos de agua.

Más negocios para los amigos: el régimen porteño adjudicó 93 millones de pesos a Mercado Libre por el servicio de cobro del estacionamiento medido y las "ecobicis"

Tras una licitación pública que la tuvo como única ofertante, la empresa del ultramacrifascista Marcos Galperin se hará cargo del sistema de cobranza virtual del estacionamiento y de las bicicletas que ya estaban concesionadas y el año pasado dejaron de ser gratuitas para su uso durante los fines de semana.


El régimen de la ciudad de Buenos Aires adjudicó el servicio de cobro del estacionamiento medido y de las "ecobicis" a Mercado Libre por la suma de 93 millones de pesos. Tras una licitación pública que la tuvo como única ofertante, la empresa de Marcos Galperin se hará cargo del sistema de cobranza virtual del estacionamiento y de las bicicletas que ya estaban concesionadas y el año pasado dejaron de ser gratuitas para su uso durante los fines de semana. "Todo estuvo planeado. Extendieron el estacionamiento medido a casi toda la Ciudad y privatizaron las bicicletas. Cuando el gran negocio estuvo listo, se lo entregaron a Mercado Libre", advirtieron desde la oposición porteña.

"Adjudícase a la firma Mercado Libre SRL por la suma total de $92.900.000 la contratación del Servicio integral de cobranza para ser utilizado en el Sistema de Estacionamiento Regulado y Buenos Aires Ciudad Bici". Mediante la Disposición N°10/22 de la Dirección General de Tesorería, a cargo de Horacio Stavale, así oficializó el régimen capitalino la adjudicación de los sistemas de cobro para la empresa de Galperin, que cuenta con su billetera virtual MercadoPago. La disposición está fechada al 24 de enero y se publicó en el Boletín Oficial el 26, pero es el resultado de una licitación que arrancó a mediados de 2021 y que tuvo a Mercado Libre como única ofertante.

Según indica en la disposición, el 10 de agosto se abrieron los sobres y "se recibió una oferta por parte de la firma Mercado Libre". La Comisión Evaluadora dio dictamen de preadjudicación el pasado 30 de diciembre. Según esa Comisión, la propuesta presentada en la licitación sin competidores fue "la oferta más conveniente para el GCBA". Los casi 93 millones de pesos para Mercado Libre se imputarán al presupuesto porteño del año 2022.

"Esto es la frutillita del postre de la concepción que tiene el macrismo de hacer negocio con todo lo que es público, cobrar todo lo que te pueda cobrar", dijo el senador nacional del Frente de Todos por la Ciudad, Mariano Recalde, el primero en advertir sobre la nueva adjudicación a través de su cuenta de Twitter. Es que para llegar a este "final anunciado", como lo calificó el senador, el gobierno de Horacio Rodríguez Larrata recorrió primero un largo camino de concesiones y privatizaciones de lo público.

"Lo del estacionamiento medido fue escandaloso por el tamaño, pasamos de tener 4 mil parquímetros a 80 mil, a inundar la ciudad para que todo el mundo tenga que pagar para estacionar", recordó Recalde sobre las leyes que en 2016 y 2018 permitieron ampliar las plazas de estacionamiento regulado, que llegaron a 14 de las 15 comunas porteñas. A fines de 2020, el oficialismo aprobó en la Legislatura la ley que habilitó el uso de medios virtuales para abonar el estacionamiento.

En cuanto a las denominadas "ecobicis", el camino fue más lento. En un principio, las bicicletas eran gratuitas y el primer indicio de privatización se produjo en 2018, cuando el GCBA concesionó el servicio a la empresa brasileña Tembici. "Hicieron que se pudiera concesionar a un privado y nosotros advertimos que lo iban a terminar cobrando, pero decían que era solo por publicidad", subrayó Recalde.

En aquel entonces, el régimen porteño se había comprometido a que el servicio continuaría siendo gratuito, "pero al final sacaron otra ley para decir que se podía cobrar", recordó el senador en referencia a la Ley N° 6.352, aprobada en noviembre de 2020, que finalmente habilitó al gobierno porteño a tarifar el uso de las bicicletas del programa "Buenos Aires Ciudad Bici". Desde marzo del año pasado, el servicio es pago para los residentes argentinos durante los fines de semana.

Este mes, en el marco del último aumento masivo de tarifas -que también incluyó VTV, peajes y acarreo-, el régimen de Rodríguez Larrata actualizó los precios de las bicicletas en un 40 por ciento y el monto a abonar por viaje único pasó de 70 a 98 pesos. Para los turistas, en tanto, el aumento fue cercano al 70 por ciento, y el pase diario, que permite realizar seis viajes de 60 minutos en 24 horas, pasó de 900 a 1.530 pesos. En cuanto al estacionamiento medido, la tarifa aumentó un 50 por ciento, pasando de 30 a 45 pesos la hora.

"Todo estuvo planeado. Extendieron el estacionamiento medido a casi toda la Ciudad y privatizaron las bicicletas. Cuando el gran negocio estuvo listo, se lo entregaron a Mercado Libre", señaló ahora Recalde. Desde diciembre de 2020, Mercado Libre ya opera como sistema de cobros del Telepase de los peajes, también a través de Mercado Pago.

Moreau llamó a "investigar" las contradicciones de Conte Grand en su declaración

El diputado afirmó que el procurador provincial intentó desvincularse del accionar de la mesa judicial. Los integrantes oficialistas de la subcomisión de espionaje que depende de la Bicameral interpretaron como "poco convincentes" los argumentos expuestos por el jefe de los fiscales bonaerenses en su declaración.


El diputado nacional por el Frente de Todos y presidente de la Comisión Bicameral de Inteligencia del Congreso, Leopoldo Moreau, sostuvo que de las declaraciones realizadas este jueves por el procurador general de la provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand, durante su exposición ante ese cuerpo parlamentario "surgen contradicciones que deben investigarse".

De esta forma se refirió el legislador a la comparecencia de Conte Grand ante la Bicameral que investiga la denuncia de una mesa judicial que operó durante la gestión de la ex gobernadora María Eugenia Vidal para armar causas judiciales contra los gremios.

"Conte Grand negó que la procuración estuviera involucrada en esto, dijo desconocer las expresiones del (exministro de Trabajo provincial, Marcelo) Villegas", señaló Moreau en declaraciones a El Destape radio.

Asimismo, afirmó que el procurador provincial intentó desvincularse del accionar de la mesa judicial, y reveló los integrantes oficialistas de la subcomisión de espionaje que depende de la Bicameral interpretaron como "poco convincentes" los argumentos expuestos por el jefe de los fiscales bonaerenses en su declaración.

La causa de la mesa judicial bonaerense se inició tras la difusión de un video hallado en dependencias de la AFI que databa de junio de 2017, y en ese registro se exhibía una reunión que mantuvieron funcionarios de Vidal, agentes del organismos y empresarios de la construcción en la cual se abordó el armado de causas contra los dirigentes sindicales.

Ese encuentro estuvo encabezado por el entonces ministro de Trabajo de la provincia, Marcelo Villegas, quien e manifestó a los presentes sus deseos de contar con una "Gestapo" -la policía política del régimen nazi- para accionar contra los gremios.

Villegas les daba a los empresarios instrucciones sobre la forma en la cual debían actuar para el armado de causas contra los dirigentes sindicales y les confiaba que la Procuración estaba al tanto sobre cómo debían ejecutarse estas maniobras.

La Bicameral resolvió el jueves convocar a Villegas "para que ratifique los dichos que volcó en el video", informó el diputado.

"La presencia de Conte Grand fue importante porque finalmente tomó conciencia del significado institucional de la Comisión. Tuvo que reconocer que hay un puñado de fiscales que actuaron de común acuerdo con servicios de inteligencia para armar causas ficticias para perseguir opositores", aseguró

Asimismo, el presidente de la Comisión de Inteligencia, volvió a indicar que el procurador "no pudo explicar" porqué tenía un teléfono encriptado de la AFI "siendo de otro poder y que no interviene en delitos federales".

viernes, 28 de enero de 2022

Escenario abierto en medio del tira y afloje en la previa del pago de 731 millones de dólares al Fondo Monetario

En la instancia final de la negociación, sigue la incertidumbre alrededor de los vencimientos del viernes y del próximo martes, que suman casi 1100 millones de dólares.


La previa del vencimiento de deuda de 731 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI) transcurrió ayer en un clima de incertidumbre y tensión en la política y los mercados. La débil situación de las reservas internacionales del Banco Central, las versiones del propio Gobierno alrededor del no pago e incluso declaraciones de miembros del oficialismo en ese sentido alimentaron las dudas, que impactaron al alza en las cotizaciones de todos los dólares paralelos, junto al deterioro de los bonos.

Este viernes, el Gobierno definirá si hace frente al vencimiento o si no lo paga y entonces ingresa en una zona de "atraso", lo cual agregaría tensión a la negociación en marcha para obtener un nuevo crédito que permita afrontar el megapaquete de 44 mil millones de dólares que recibió en 2018 Miauricio Macri Blanco Villegas. En efecto, la decisión de pagar o no tiene que ver con la estrategia en la propia negociación, que por estas horas es frenética.

Hasta ahora, la administración de Alberto Fernández cumplió todos sus compromisos con el Fondo a pesar de la negociación vigente y de haber calificado, infinidad de veces tanto el Gobierno como el propio FMI, como insostenible e impagable para el país el acuerdo de 2018.

La posibilidad del no pago en las puertas de un acuerdo tiene como último antecedente la situación de septiembre de 2003, con Néstor Kirchner en la presidencia y Roberto Lavagna como ministro de Economía. En esa oportunidad, el país postergó 72 horas el pago de 2900 millones hasta que se cerró un nuevo acuerdo con el organismo, por el cual luego se reintegró esa suma a las reservas.

Horas decisivas

La definición sobre el pago del vencimiento está atada a las señales que ofrezca la negociación, que corre horas decisivas porque encima el martes próximo hay otro vencimiento con el FMI por 368 millones de dólares en concepto de intereses del crédito. Guzmán tiene diálogo constante con la norteamericana Julie Kozack y el venezolano Luis Cubeddu, a cargo de la relación técnica del Fondo con el Gobierno.

Lo cierto es que si el pago no se realiza no se gatilla un default inmediato sino que se abre una instancia administrativa al interior del organismo que demora varias semanas. A medida que pasen los meses, se caerían todas las herramientas financieras de otros organismos internacionales como el Banco Mundial y el BID, y además se afectaría la relación con otros socios del Fondo, por caso hasta China. Mucho antes, la economía local ingresaría en una fase de tensión de otro calibre al visto hasta ahora.

El principal escollo para alcanzar un acuerdo con el FMI, que resolvería el calendario de vencimientos al menos en el corto plazo, sigue siendo la velocidad del ajuste fiscal. El ministro Guzmán expuso en su momento que el Gobierno quería que el equilibrio fiscal se alcance recién en 2027, desde el déficit del 3 por ciento registrado en 2021. Eso evitaría frenar la recuperación en 2022 y 2023, años claves para el oficialismo de cara a las próximas elecciones presidenciales.

Sin embargo, trascendió que el Fondo quería que el equilibrio se alcance en 2024, lo cual obligaría a aplicar fuertes recortes en el gasto y eliminación de subsidios de forma inmediata. Una vez que se establece el sendero fiscal, junto al de acumulación de reservas y a la evolución de la emisión monetaria, la economía entra en un esquema de monitoreo periódico de parte del FMI como requisito para la liberación del dinero del nuevo crédito. De esa forma se implementan las medidas económicas "acordadas" con el Fondo, un nuevo orden que implica la reducción de grados de libertad de la política.

Las últimas versiones marcan que el Gobierno se estira a 2026 para la fecha límite del equilibrio, aunque el Fondo no cedería más allá de 2025. También habría desacuerdo en torno a los objetivos fiscales parciales de cada año hasta llegar a ese momento. En medio de una negociación, el no pago del vencimiento del viernes no implica patear el tablero y se supone que esa situación se podría digerir mientras se llega al acuerdo, que sigue siendo la idea mayoritaria (aunque no unánime) en el Frente de Todos.

Sin embargo, la profundización del escenario de incertidumbre sigue deteriorando la situación financiera y cambiaria. El dólar blue, el contado con liquidación y el dólar MEP superan máximos históricos y los bonos siguen en caída, lo cual pone más presión sobre la inflación y complica la capacidad crediticia de las empresas. El año pasado, las turbulencias financieras convivieron con una fuerte recuperación de la economía real, pero para este 2022 la situación luce más compleja.

Cumbre de Alberto, Massa y Guzmán en medio de rumores de acuerdo con el FMI

Sergio Massa se involucró de lleno en la etapa final de la negociación con el FMI y se apersonó en la Casa Rosada ayer a última hora de la tarde, a poco de que venza un pago de más de 700 millones de dólares, en medio de versiones de avances importantes en las conversaciones, que no significa que el acuerdo se haya alcanzado.

Fuentes al tanto de las negociaciones afirmaron que sobre el final de la tarde el FMI habría aceptado ceder un poco más en sus exigencias de ajuste, lo que empujó las versiones de acuerdo, que las mismas fuentes se encargaron de relativizar. "Estamos más cerca, pero todavía no hay acuerdo", afirmaron.

Pasadas las ocho de la noche, fue Guzmán el que abandonó su despacho en el Palacio de Hacienda y se sumó a la reunión con el presidente y Massa, lo que alimentó las versiones de un anuncio inminente del acuerdo con el FMI, al punto que la vocera Gabriela Ceuruti tuvo que salir a aclarar  vía Twitter que no había novedades para comentar.

En el mercado sobre la noche ya había certezas de acuerdo y los operadores se abalanzaron al premarket para comprar bonos de la deuda argentina. Se especulaba con que este viernes Argentina pagará el vencimiento de poco más de 700 millones de dólares y luego del acuerdo el FMI enviará fondos para fortalecer las reservas. Como sea, se espera un rebote de los papeles y por eso salieron a comprar.

La plana mayor del Gobierno vivió una jornada frenética de reuniones. Alberto Fernández se mantuvo en su despacho de la Rosada recibiendo funcionarios y lo propio hizo Martín Guzmán cruzando la calle, en el Palacio de Hacienda. Pero después de las 20, el ministro cruzó a la Casa Rosada y alimentó las versiones de un acuerdo inminente, que incluso según los rumores se podría anunciar este viernes.

La discusión pasa por el tamaño y el ritmo del ajuste para equilibrar las cuentas fiscales, que el Gobierno vende como una discusión sobre el crecimiento.

El miércoles por la noche las negociaciones cerraron con Martín Guzmán aceptando reducir el déficit este año a 2,5 puntos del PBI. Un salto importante del 3,1 por ciento que se había plantado al iniciar las negociaciones. Pero para el FMI no es suficiente y sigue exigiendo una reducción muy brusca hasta el 1,9 por ciento del PBI.

Pero el corazón de la pelea pasa por el 2023, el Gobierno quiere moderar el ajuste para tener alguna chance en las presidenciales y que no le pase como a Macri que se acercó al equilibrio fiscal pero perdió el poder.

Guzmán propone para el año que viene reducir el déficit al 2 por ciento del PBI, esto es aumentar apenas medio punto el ajuste. El Fondo rechaza de plano esa moderación y se mantiene en su exigencia de bajarlo al 1,4 por ciento. Sin embargo, al avanzar la tarde del jueves los rumores en el mercado y la Casa Rosada eran que se produjeron avances importantes.