Cuando se concrete la llegada del cuarto desembolso, la alianza de derecha gobernante habrá recibido 38.900 millones de dólares en menos de un año, alrededor del 70 por ciento del monto total del crédito acordado el año pasado. A pesar de los catastróficos resultados de la gestión de Cambiemos, el organismo internacional de crédito hace propio el relato oficial.
El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional se reunió ayer y votó la aprobación de la tercera revisión de la evolución de la economía argentina conforme al Acuerdo Stand-By. Por consiguiente, autorizó el desembolso del siguiente tramo del préstamo que el próximo martes deberían estar llegando al país.
Serán unos 10.800 millones de dólares correspondientes a 7.800 Derechos Especiales de Giro (DEG), de los cuales el régimen macrifascista podrá disponer 9.600 millones de dólares para abastecer el mercado cambiario a partir del lunes 15 de abril.
Este desembolso se suma a los otros 31.100 DEGs que ya giró al país desde junio del año pasado. Así, dentro de las próximas 48 horas hábiles, el organismo multilateral de crédito le habrá prestado a la Argentina unos 38.900 millones de dólares en el transcurso de casi 10 meses.
Al término de las deliberaciones del Directorio, Christine Lagarde, destacó que el programa económico está funcionado correctamente porque los déficits gemelos que llevaron al país a pedirle financiamiento se redujeron sustancialmente y, además, la recesión habría tocado piso y la economía estaría próxima a volver a expandirse. Por eso, insistió en la conveniencia de continuar con el programa y reforzar los ingresos del fisco para cumplir con el déficit cero este año.
"Las políticas de las autoridades que sustentan el acuerdo respaldado por el FMI están dando fruto. El elevado déficit fiscal y en cuenta corriente -dos grandes vulnerabilidades que condujeron a la crisis financiera el año pasado- están disminuyendo. La actividad económica se contrajo en 2018, pero hay indicios de que la recesión ha tocado fondo, y se espera una recuperación gradual en los próximos trimestres. Sin embargo, la inflación sigue siendo elevada; las expectativas inflacionarias están aumentando y la inercia inflacionaria resulta difícil de quebrar", sostuvo.
"El gobierno argentino dio muestra de su determinación de asegurar que la relación deuda pública/PIB se encuentre en una trayectoria sostenible, reduciendo el déficit primario de 2018 por debajo de la meta fijada en el programa. No obstante, a la luz de un nivel inferior al esperado del ingreso tributario en el primer semestre del año, será crítico actuar continuamente con prudencia en la ejecución de los planes de gasto y tomar otras medidas para incrementar los ingresos fiscales a fin que la posición fiscal de 2019 llegue al balance primario. Es necesario redoblar los esfuerzos por mejorar el marco fiscal a mediano plazo y la gestión de deuda",agregó la sosias de Sergio Denis.
Además, respaldó las medidas anunciadas recientemente por Guido Sandleris en respuesta a la mayor volatilidad financiera mundial y destacó que la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central, "de ser aprobada como ley, afianzará la credibilidad de la política monetaria".
A su vez, Lagarde aseguró que "proteger a los más vulnerables del impacto de la recesión y de la elevada inflación sigue siendo una prioridad crítica". En este sentido, rescató las medidas del Gobierno para mejorar la cobertura de la red de protección social y proporcionar más recursos a los pobres. "Se necesitará un trabajo continuo para abordar las brechas restantes en la cobertura de la red de protección social y para mejorar la eficacia de los programas sociales en la lucha contra la pobreza", agregó.
En el documento difundido por el FMI, Lagarde también repasó los avances del equipo de Dujovne en la administración de la deuda de corto plazo: "las condiciones de mercado favorables le han permitido al gobierno refinanciar integralmente la deuda que vencerá durante los próximos meses. La tasa de interés pagada por esa deuda ha disminuido y las autoridades están redoblando los esfuerzos por prorrogar los vencimientos de la deuda recién emitida. Las autoridades también están implementando políticas para desarrollar los mercados de deuda en moneda nacional".
De acuerdo a la titular del FMI, Argentina debe avanzar en una serie de reformas que mejoren la producción con foco en la competencia y una estructura impositiva más eficiente y menos distorsiva: "las reformas del lado de la oferta son esenciales para lograr un crecimiento vigoroso, sostenible y equitativo y para mejorar los niveles de vida de la población argentina. Las prioridades incluyen esfuerzos adicionales por crear un sistema tributario menos distorsionador, promover una mayor competencia en los mercados internos de productos, eliminar las barreras al comercio internacional y a la inversión extranjera, afianzar la gobernabilidad, hacer frente a la corrupción y promover la equidad de género".
A modo de conclusión, la economista que preside el FMI recordó que las políticas económicas van a requerir de continuidad y de respaldo político para su implementación: "el éxito de los planes de políticas de las autoridades depende de una implementación continua y resuelta. Esto requerirá la construcción de un apoyo amplio a favor de políticas que mitiguen las vulnerabilidades económicas, incrementen el potencial de crecimiento de Argentina y promuevan la confianza del mercado".
