En el ojo de la tormenta con una imputación sobre sus hombros, la infornicable titular de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, ahora apuntó contra la ex presidenta y actual senadora Cristina Fernández de Kirchner.
La referente del PRO pidió a la Cámara Federal que deje sin efecto la falta de mérito dictada por el juez Sebastián Casanello en la causa por presunto lavado de dinero en la que está detenido el empresario Lázaro Báez. La Unidad de Información Financiera también apeló.
Casanello había considerado que no existen pruebas suficientes para procesar a la ex mandataria pero ahora la OA y la UIF quieren revertir esa decisión en la Cámara Federal porteña, que hasta ahora acompañó los reclamos del oficialismo. La presentación judicial llegó un día después de que la fiscal federal Paloma Ochoa imputara a Alonso por haber apartado al ex hijastro de Flavia Palmiero de la investigación del intento de condonar la deuda a la empresa Correo Argentino, de la familia Macri, con el Estado.
"Concurren elementos de convicción suficientes para vincular a la encartada con las maniobras y, en consecuencia, dictar su procesamiento", remarcó la OA en el escrito presentado en Comodoro Py. Asimismo, afirmó que la actual senadora nacional "tenía vocación de dominio sobre los fondos dinerarios canalizados en el exterior" por el detenido dueño de Austral Construcciones, Lázaro Báez.
El revés judicial del viernes pasado había dejado atrás la hipótesis de la Casa Rosada, que indicaba que el dinero de Báez era de Cristina o que el constructor era testaferro de la ex mandataria. Todas las pruebas indican que las cuentas con dinero que Báez sacó al exterior así como las sociedades constituidas en el extranjero y la propia Austral Construcciones figuran a nombre de Báez o sus allegados, con los cuatro hijos del constructor como últimos beneficiarios.
"Sabía -o consentía- cuando menos en forma genérica, las maniobras de expatriación, ocultamiento y exteriorización" de dinero presuntamente proveniente de sobreprecios en la obra pública, insistió ayer sin embargo la Oficina Anticorrupción.
Hace seis días, Casanello había desestimado las teorías de la UIF y la OA. De forma detallada, el juez demostró en un texto de 33 hojas que todas las sociedades están constituidas por el entorno de Báez, principalmente Daniel Pérez Gadin y Jorge Chueco, y tienen como únicos beneficiarios a los cuatro hijos de Báez. Hasta ahora, ni la OA ni la UIF pudo aportar una sola evidencia que vincule a Fernández de Kirchner con esos fondos que movió Báez.
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