El senador rastrero y compañero de fórmula de Miauricio Macri Blanco Villegas se refirió a la ayuda social en el Presupuesto y a la situación de una mujer utilizada como mula de droga.
El candidato a vicepresidente por la alianza de derecha Juntos por el Cambio, Miguiel Ángel Pichotto, hizo declaraciones xenófobas contra Vanessa Gómez Cueva, una ciudadana peruana a la que se le permitió reencontrarse con sus pequeños hijos en el país tras ser deportada y culpó a los movimientos sociales por la deuda externa.
"Sectores a los cuales el Estado hace un esfuerzo extraordinario para ayudarlos, son una de las causas del endeudamiento publico mantener el sistema de seguridad social, el 65% del total del Presupuesto esta puesto y comprendido ahí, en planes piquetero,cooperativas de la pobreza, cartoneros", declaró el hijo de puta.
"Buscan debilitar al gobierno y el gobierno le ha dado todo a esa gente, una parte vital de ese Presupuesto que podría haber ido a las pymes, a créditos de la producción, se lo ha dado a esta gente que no labura para siempre", sostuvo el sorete en declaraciones radiales.
También criticó la decisión de la Dirección Nacional de Migraciones (DNM) de levantar el lunes la prohibición de ingreso a la Argentina para Vanessa Gómez Cuevas, quien fue expulsada en febrero a pesar de que había cumplido una condena de cuatro años de cárcel por narcotráfico. "Argentina está enferma", aseguró.
“Hay una patologia en Argentina, una delincuente peruana narcotraficante que fue condenada a cuatro años, cumplió la condena y la expulsaron. Vendía droga, desintegraba familias y ahora como somos humanitarios, buenísimos, vamos a permitirle que vuelva para que se encuentre con los hijos mayores acá, extraordinario”, se quejó el senador, mientras el periodista oficialista Eduardo Feinmann coincidía con su discurso de odio.
Pichotto reforzó el discurso oficial que demoniza a los migrantes que viven en el país, quienes tuvieron que afrontar desde el comienzo de la gestión de Macri Blanco Villegas un decreto que complejiza su entrada al país y otras restricciones que buscan obstaculizar su radicación.
El candidato a la vicepresidencia cuestionó no sólo el accionar de la Dirección de Migraciones, que le permitió la vuelta a Vanessa por “razones excepcionales de índole humanitaria”, sino que también se mostró disconforme con los tratados internacionales de proteccción a los derechos humanos y con las leyes nacionales.
“Va a volver una peruana que estuvo condenada a cuatro años por narcotráfico por una cuestion de integracion familiar. Esta mujer vendia droga a los pibes y destruia familias. Estamos enfermos en Argentina, no sé qué organismo internacional dispuso que vuelva esta mujer”, reforzó el mal parido sobre la situación de una mamá de tres hijos argentinos quien había sido contratada por una banda de narco como “mula” para ingresar estupefacientes al país.
En 2011, Vanessa cumplió una condena de cuatro años de prisión. En febrero de esta año la justicia decidió deportarla a su país con su bebe, todavía lactante, y separarla de sus otros dos hijos, menores de edad. Tras el pedido de organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales y de su abogado en la justicia, el lunes pasado Migraciones levantó su prohibición de ingresar al país.
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