La fiscal Caamaño reavivó el proyecto para democratizar la justicia. El candidato presidencial del Frente de Todos había descartado una reforma constitucional.
La titular de Justicia Legítima, Cristina Caamaño, volvió a encender la polémica sobre una posible reforma de la Constitución y le recomendó a Alberto Fernández avanzar en ese sentido para recortarle poder a los jueces federales de Inodoro Py.
La idea de una reforma constitucional flota en el aire del kirchnerismo y es promovida por el grupo que lidera el ex juez de la Corte Raúl Zaffaroni, de quien Caamaño es discípula.
Sin embargo, el propio candidato presidencial del Frente de Todos dijo recientemente que "no hay ninguna posibilidad" de que lo convenzan de impulsar cambios. "Definitivamente estoy seguro que el problema no es la Constitución", aseguró.
Pero los dichos de Fernández parece que no calman al kirchnerismo duro. Caamaño no sólo le pidió a Alberto una reforma sino que además reflotó el proyecto de Cristina para democratizar la justicia, que terminó en un estruendoso fracaso de la ex presidenta y que le valió el enfrentamiento con la casi la totalidad de Inodoro Py y las consecuentes causas judiciales.
La fiscal pidió "ir para adelante con una premisa, que es democratizar a la Justicia". En declaraciones a El Destape radio, sostuvo que "cuando lo planteamos fue tremendo. Ahora es el momento de llevarlo adelante: hacer un ingreso democrático, reconstruir el Estado de derecho, evitar la intromisión y a la vez acercanos a la ciudadanía".
Caamaño le recomendó a Fernández "ampliar" la cantidad de juzgados federales de Inodoro Py para "diluir su poder" y argumentó que "si en lugar de 12 jueces y 12 fiscales fueran más, no todas las causas le caerían a Bonadio". Más temprano, en declaraciones a la ultraoficialista radio Mitre, insistió con que "si queremos disminuir el poder de Comodoro Py habría que ampliarlo".
A pesar de ello, la fiscal se mostró tranquila por los cambios que empiezan a verse en la justicia federal y el indudable giro de algunos magistrados tras el triunfo de Alberto en las PASO. "Los jueces no comen vidrio", explicó. "Las cosas ya se están acomodando y van a ir mejorando. Si cambia el gobierno, los propios jueces van a evitar promiscuidades", agregó.
En una muy dura entrevista con el periodista oficialista Marcelo Longobardi, que llegó a preguntarle si vive en "un frasco", Caamaño ratificó su idea de reformar la Constitución entre otras cosas para limitar la posibilidad del Poder Ejecutivo de tomar deuda. "Esas son las cosas que habría que hacer ante decisiones tan importantes que afectan a los argentinos. Esta no es una idea personal sino que la estuvimos trabajando hace tiempo", recalcó.
De todos modos, la presidenta de Justicia Legítima reconoció que las prioridades de Alberto Fernández son distintas. "Ahora es momento de que la gente pueda comer. Si llega a ganar, va a necesitar que la gente coma", dijo y afirmó que no trabaja para el candidato del Frente de Todos ni para Cristina Kirchner.
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