Detuvieron a la nueva cúpula de la Federal en Santa Fe tras la balacera al jefe y vuelve a cobrar fuerza la interna policial

La fiscalía reveló que el comisario discutió con conocidos en la autopista y tras el incidente, agentes federales modificaron la escena.

El fiscal Matias Edery y la titular de la Agencia de Criminalidad 

Organizada y Delitos Complejos, María Eugenia Irribaren

En las últimas horas, la Tropa de Operaciones Especiales detuvo al jefe de la delegación Santa Fe de la Policía Federal, el comisario Mariano Valdés, y a su segundo, el subcomisario Higinio Bellagio, por la balacera donde fue herido Valdés en la autopista Rosario-Buenos Aires.

Según informó el fiscal Matias Edery, a cargo de la investigación, el comisario detuvo voluntariamente el Ford Focus en el que se trasladaba, se bajó del auto y se reunió con personas conocidas en la parte posterior.

Lo que comenzó como una charla entre conocidos fue tomando temperatura que derivó en un enfrentamiento armado que resultó con el comisario herido de bala que no fueron mortales de milagro. Valdés logró ingresar al auto en medio del fuego, repeliendo el ataque.

La secuencia, que podría haber sido extraída de una película de Quentin Tarantino, fue reconstruida a partir de las pericias balísticas y declaraciones a testigos, entre ellos, la del acompañante de Valdés, la suboficial Roxana González.

Respecto a González, el fiscal descartó la hipótesis que había tomado fuerza en las últimas horas sobre un supuesto conflicto interpersonal con Valdés e indicó que la mujer "en principio no tuvo ninguna participación".

"Luego de analizar la trayectoria de los disparos y varias declaraciones de testigos que coinciden con las pericias, estamos en condiciones de descartar el hecho de robo (la versión que intentó instalar Valdés) y también que se haya tratado de un tema pasional o personal entre los ocupantes del vehículo", sostuvo el fiscal Edery en declaraciones a la prensa.

Minutos después del enfrentamiento, siguió explicando a fiscalía, cuando la camioneta en la que se trasladaban los atacantes se retiró llegó el subcomisario Higinio Bellagio, a quien le imputan ser el responsable de modificar la escena de los hechos y de adulterar evidencias.

En consecuencia, Edery ordenó la detención de Valdés y de Bellagio tras el allanamiento de la delegación de la Policial Federal de la ciudad de Santa Fe por incumplimiento de los deberes de funcionarios públicos.

Con el procesamiento de Valdés y Bellagio, ya son dos las cúpulas que se removieron en los últimos cinco meses. En mayo, el entonces jefe de la fuerza, Marcelo Lepwalts, fue detenido junto a otros cinco policías por presunto tráfico de drogas al encontrarse cocaína preparada para la distribución en la delegación policial.

Fuentes al tanto de la investigación indicaron que el caso podría dejar al descubierto un oscuro entramado "de extrema gravedad", de disputas entre dos facciones dentro de la misma policía que responden a dos provincias distintas: la jurisdicción que comanda Santa Fe con la de provincia de Buenos Aires.

De confirmarse este escenario, el atentado a Valdés está lejos de ser "un ataque mafioso" efectuado por una banda narcocriminal, como en un principio aventuró la beoda ministra Patricia Bullrich Luro Pueyrredón, o al menos, que no sería ajena a la misma policía.

Por su parte, María Eugenia Irribaren, titular de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos, informó que el próximo lunes se llevaría a cabo la audiencia imputativa si se termina de procesar toda la información durante el fin de semana y se definan los cargos.