El presidente venezolano, Nicolás Maduro, se juramentó ayer ante la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), luego de ser reelegido como jefe de Estado en las pasadas elecciones del 20 de mayo en las que obtuvo el 68 por ciento del respaldo.
En su alocución el mandatario recordó que la oposición y el Gobierno estuvieron a pocas horas de firmar el acuerdo de paz en República Dominicana para medirse en las elecciones presidenciales de este 2018, sin embargo, una llamada desde Bogotá al dirigente Julio Borges lo impidió.
“Un grupo de los que había consensuado la fecha del 20 de mayo recibió la presión del exencargado de negocios de Estados Unidos, Todd Robinson, quien ahora se encuentra tomando un avión para su país”, afirmó.
Aseguró que para la dirigencia política de este país valieron más sus interesas particulares que la vida política. “Pero aún así, hoy podemos decir que hemos tenido unas elecciones legales, justas, legítimas y por eso he venido a entregar mis credenciales emanadas de la voluntad popular”, declaró ante los constituyentes.
“No estamos haciendo lo suficiente ni lo estamos haciendo bien, hace falta una gran rectificación profunda, hace falta hacer las cosas de nuevo y mejor”, reconoció Maduro y además ratificó su compromiso con el pueblo.
Asimismo, hizo un llamado a todas las autoridades del país para buscar la solución de los problemas, “no hay excusas para atender al pueblo”.
Durante el acto, fueron presentados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) los documentos que acreditan los resultados de los comicios presidenciales y que reflejan la voluntad popular expresada a través del voto.
Maduro, abanderado del Frente Amplio de la Patria, fue proclamado el martes como presidente venezolano por el CNE, acompañado de autoridades de diversas instituciones del país y acompañantes internacionales de las elecciones.
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