Tras compartir un chocolate con funcionarios e integrantes de otros poderes del Estado en la Casa Rosada, el ex hijastro de Flavia Palmiero caminó desde allí hasta la Catedral para participar del Tedeum. Lo hizo en el marco de un fuerte operativo de custodia y sin contacto con la gente. Al mediodía almorzó con algunos ministros en la Quinta de Olivos.
Mugrizio Macri Blanco Villegas asistió al tradicional Tedeum en la Catedral metropolitana -que se realiza todos los 25 de mayo desde el primer Gobierno Patrio de 1810, en agradecimiento a Dios por el surgimiento del Estado argentino- y luego se retiró a la residencia de Olivos donde ofreció un locro, al cumplirse un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo.
El idiota confeso concurrió a las 10 a la Catedral, donde la ceremonia fue presidida por el arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Mario Poli.
El subnormal fue acompañado por su esposa, la explotadora de trabajadores textiles esclavos Juliana Awada; la tullida vicepresidenta Gabriela Michetti; el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larrata; el presidente provisional del Senado u ex presidente por medio día, Federico Pinedo; el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; y el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti.
Durante la celebración, Poli dijo que "la indiferencia de los ricos frente a los pobres no pasa inadvertida ante Dios" e hizo una fuerte declaración contra el proyecto de legalización del aborto que se debatirá el próximo 13 de junio en el Congreso.
También participaron del Tedeum integrantes del gabinete nacional, y antes del oficio el hijo bobo de Franco macri y el cardenal dejaron una ofrenda floral en el mausoleo donde se encuentran los restos del General José de San Martín.
La jornada comenzó a las 9 en Casa de Gobierno, donde sorete mal cagado compartió un chocolate caliente con invitados. Luego caminó desde la explanada de la Casa Rosada hacia la Catedral. Durante el trayecto, efectivos de las Fuerzas Armadas y de Seguridad rindieron con banderas, bandas y escoltas, los honores correspondientes.
Después de la celebración religiosa, Macri Blanco Villegas ofreció un almuerzo en la residencia de Olivos, en el que junto a su tilinga esposa sirvieron locro a sus invitados.
Allí, el infeliz expresó que "hoy es un día para que nos reunamos y agradezcamos a Dios la Patria que tenemos".
"Todo pasa por ponernos de acuerdo, que sigamos construyendo esas bases sólidas que nos permitan crecer, no un año ni dos, sino 20 años seguidos y así derrotar definitivamente a la pobreza", puntualizó y dijo que "hay oportunidad de progreso para todos".
"Sentimos que trabajando juntos vamos a construir realmente lo que soñamos: un gran futuro para compartir. ¡Viva la Patria!", concluyó el ex hijastro de Flavia Palmiero.
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