El jefe de Gabinete negó que Macri Blanco Villegas tenga pensado un cambio de ministros. Dijo que el régimen fascista recurrió al Fondo Monetario Internacional en busca de "un crédito que nos haga menos vulnerable", sin precisar qué monto se solicitará. "No nos vamos a quedar en la mitad del camino", aseguró y afirmó que no hay otra alternativa que el gradualismo.
Marcos Peña Braun Menéndez ofreció ayer a la tarde una conferencia de prensa vacía de anuncios, en la que no precisó el monto que se le va a solicitar al Fondo Monetario Internacional ni las condiciones que el país deberá aceptar para recibir el préstamo, al indicar que la negociación abierta hoy por el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, en Washington "va a durar semanas".
Por otro lado, el ministro coordinador insistió en que "no hay razones para agitar los fantasmas" de crisis económicas anteriores, descartó que Mugrizio Macri Blanco Villegas evalúe realizar cambios en el gabinete y ratificó que "el gradualismo es el único camino viable", pero no se animó a pronosticar cómo continuará la cotización del dólar ni cómo impactará en los precios para no "generar una ilusión de tranquilidad".
Con el ministro de Hacienda en Washington, tras tomar un vuelo de urgencia para abrir las negociaciones con el FMI, Peña Braun Menéndez sólo pudo precisar que las negociaciones "van a durar semanas" y descartó ofrecer cifras del monto que la Argentina le solicitará al organismo multilateral, préstamo al que calificó como "una herramienta más de respaldo", que "nos hace menos vulnerables".
El sorete mal cagado llamó a "no agitar fantasmas" y planteó la negociación con el FMI como parte de un "diseño" que ofrece la "posibilidad de adaptarnos" frente a las políticas económicas aplicadas durante los últimas semanas, que reconoció no alcanzaron para frenar la presión cambiaria.
Además señaló que "estos 30 meses de Gobierno fueron positivos" y consideró que por cuestiones internas y externas "tenemos mayor exigencia de los que nos prestan la plata".
Ante esta situación, indicó que el régimen macrifascista manifestó "la intención de abrir un trabajo en conjunto con el FMI" y afirmó que la Argentina "nunca dejó de formar parte" de ese organismo, aunque el país se había aislado del mundo
"Hemos podido evitar una gran crisis económica, reducir la pobreza y el desempleo", indicó el funcionario, al tiempo que buscó deslindar responsabilidades en el contexto internacional-en referencia a la suba de la tasa de interés en Estados Unidos- y volvió a cargar las tintas sobre la herencia recibida, al señalar que "este es el camino que nos va a permitir superar problemas que no solo heredamos del Gobierno anterior sino desde hace 70 años".
En ese punto, el hijo de puta insistió con que "el gradualismo es el único camino viable" y agregó que "esta vez no nos vamos a quedar en la mitad del camino".
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