Así lo informó el rectorado de la Universidad, aunque aclaró que la decisión oficial es "de hecho" por lo que buscarán una solución definitiva. El repudio unánime de estudiantes, profesores, trabajadores y toda la comunidad de San Martín fue clave.
El régimen fascista de la alianza de derecha Cambiemos es experto en avanzar sobre espacio conquistado y después, de acuerdo a la resistencia social con la que se encuentre, retroceder o no en sus políticas. Eso es lo que sucedió con la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM), ubicada en el partido homónimo de la provincia de Buenos Aires.
La semana pasada, la comunidad educativa de la casa de estudios se desayunó que la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) había resuelto quitarle 12 mil metros cuadrados del campus Miguelete para cederlos a la empresa de transporte ferroviario de cargas Nuevo Central Argentino S.A.
En esa superficie funciona actualmente el Centro de Desarrollo Tecnológico e Incubación de Empresas y se prevé la construcción de la Escuela Secundaria Técnica, el Centro de Prototipado Integral de Viviendas Económicas y Sustentables y el Laboratorio de Ciencia y Nanosistemas.
En días en que el sector ya estaba movilizado por el plan de lucha que llevan adelante las 57 universidades nacionales en todo el país, el rechazo a la avanzada privatista fue unánime, rápido y contundente.
Autoridades, estudiantes, profesores, trabajadores no docentes, vecinos y funcionarios públicos como el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis, protagonizaron este miércoles un abrazo multitudinario a la UNSAM y consiguieron una solución momentánea.
"Como resultado de las acciones emprendidas la resolución del AABE ha sido suspendida de hecho. Seguimos trabajando en la búsqueda de una solución definitiva que respete los intereses de toda la comunidad", informó este jueves el Rectorado, liderado por Carlos Greco, a través de un comunicado.
"El abrazo a la Unsam que realizamos ayer constituye un hito en nuestra conciencia colectiva por la defensa de la educación pública y de nuestro proyecto universitario (...) El sentido de ese abrazo es asumir que nuestra tarea cotidiana pone el conocimiento al servicio del desarrollo y la justicia social", ponderaron las autoridades tras la victoria de la movilización.
El conflicto se originó cuando el régimen fascista de la ciudad Autónoma de Buenos Aires le pidió a Nación los terrenos ubicados a los costados de la estación de Colegiales del Tren Mitre para negocios inmobiliarios. Ese lugar era destinado a las actividades de transporte de cargas de Nuevo Central Argentino S.A., propiedad de la empresa Aceitera General Deheza. Pero el régimen macrifascista nacional cedió el espacio a Capital Federal y pretendía mudar ese depósito a una parte de la UNSAM. La lucha logró detenerlo. Ahora habrá que esperar la cancelación definitiva.
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