La líder de la Tupac Amaru fue dada de alta tras la descompensación que sufrió en la audiencia por la causa conocida como “pibes villeros”. A contramano de lo recomendado por los médicos, Milagro Sala fue traslada directo a la sede del Poder Judicial de Jujuy para seguir adelante con el juicio. Denunciaron la medida como otra prueba de “hostigamiento” contra la dirigente.
“Contra la opinión de sus médicos se la dio de alta de forma forzada para poder continuar con el juicio”, informaron desde la Tupac Amaru sobre el estado de salud de Sala. Según la organización, la dirigente fue “dada de alta y fue trasladada” por la tarde para continuar con las audiencias en el tribunal.
Desde el Comité por la libertad de Milagro Sala señalaron que está decisión, en contra de la recomendación de los médicos, es “parte del hostigamiento sistemático que tiene como finalidad dañar la integridad física y psíquica de la diputada del Parlasur”.
El pedido de la derivación médica fue hecho por el médico del Poder Judicial para descartar un posible cuadro de pancreatitis evidenciado en plena audiencia, que tuvo que ser inmediatamente suspendida tras la descompensación de Milagro.
La dirigente social -presa política del régimen fascista jujeño de Gerardo Morales- ya había sido internada el viernes anterior en el hospital Soria con diagnóstico de “abdomen agudo”, por una descompensación sufrida el jueves de la semana pasada por la noche en la vivienda de la localidad de El Carmen, donde cumple prisión domiciliaria.
"Llamamos al SAME, después se dio el parte a la Justicia, que envió al cuerpo médico del Poder Judicial, que recomendó la internación de Milagro, señalaron desde el Comité por la Libertad de Sala tras aquel episodio.
El cuadro volvió a repetirse el martes por la tarde durante la audiencia donde vomitó tres veces (una de ellas con sangre) y debió ser atendida por personal del SAME y el médico del Poder Judicial, su traslado fue demorado más de una hora.
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