Doce supermercados amanecieron ayer con las persianas bajas y los empleados se enteraron de la noticia al llegar a sus puestos. La sucursal del DOT cerrará sus puertas y las otras, serán trasferidas a la firma Día.
Juan Bautista Alberdi al 1500. Eran las 10.30 de la mañana y varias señoras se agolpaban en las puertas del Walmart con sus bolsas y sus changuitos de compras. Las persianas estaban bajas. Ya no quedaban trabajadores en la puerta, se retiraron a sus domicilios abatidos por la noticia.
Las señoras cuchicheaban entre ellas. De pronto, se abre una de las puertas metálicas y salen dos empleados. Una de las mujeres del carrito de compras se acerca y pregunta: "¿hoy no abren, qué pasa?". "No, señora. El supermercado cerró", contesta el hombre con tristeza. La mujer no sale de su asombro. "No puede ser, todos los días algo nuevo en este país. Les deseo mucha suerte, sobre todo por los puestos de trabajo", dice y se va.
Más temprano, la escena había sido diferente. Los trabajadores de la sucursal de Caballito habían llegado a trabajar como todas las mañanas y se habían encontrado con las persianas bajas, sin entender lo que pasaba. Hasta el día anterior habían trabajado con normalidad.
La noticia rapidamente empezó a replicarse entre los compañeros. No era una sucursal, pasaba en las 12 de Capital Federal y en el hipermercado del DOT. En total, son más de 200 trabajadores los afectados.
Walmart, a su vez emitió un comunicado en el que anunció la venta de sus 12 locales de menos de 500 mts2 a la empresa de capitales españoles Día y el cierre definitivo del hipermercado ubicado en el shopping DOT en Saavedra.
Juan Pablo Quiroga, gerente de Relaciones Intitucionales de Walmart, explicó que "los locales de menos de 500 mts² no forman parte de nuestra expertise y nunca los escalamos y es un formato que en 2017 nos dejó una perdida de $ 25.000.000. Su venta nos permitirá comentrarnos en otros formatos que nos permitirán crecer".
En cuanto a los puestos de trabajo, Quiroga sostuvo que Día se comprometió a absorber 50 trabajadores en sus tiendas. Con los otros 150, Walmart deberá iniciar un proceso de negociación.
Si bien piensa ubicar a 50 personas, al no haber plazas en Capital Federal, los trabajadores deberán optar por aceptar puestos en sucursales del conurbano como Avellaneda, San Fernando, Lanús, San Justo, entre otras. El resto, deberá aceptar su indemnización. Así, muchos trabajadores quedarán en la calle, en un país en el que cada día hay cientos de nuevos despidos.
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