Creen que el clima puede ser clave para que haya una mayor afluencia de votantes. En el peronismo dicen que les alcanza con sumar 140 mil votos.
El ex hijastro de Flavia Palmiero confía en una ayuda meteorológica para que el domingo 27 de octubre se incremente el número de votantes respecto de las primarias y eso le permita soñar con entrar al balotaje.
Algunos pronósticos extendidos a todo el mes, como Accuwheater, vaticinan que el domingo de las elecciones habrá una temperatura media de 24º y una sensación térmica de 26º. Además pronostican que no lloverá y estará soleado, con algo de nubosidad. Una temperatura más agradable que la que hubo en las invernales primarias.
La mayor participación electoral es una de las premisas que levanta Marcos Peña Braun para convencer a propios y ajenos de que el hijo bobo de Franco Macri tiene chances concretas de entrar al balotaje. En ese sentido el cineasta lilito Juan José Campanella habla de la "rebelión de los mansos" que estaban adormecidos y ahora quieren salir a "salvar la república".
En las PASO votó el 76,4 por ciento del padrón, algo más que en las de 2015 (74,98 por ciento). En la anterior presidencial el salto fue de seis puntos: votó un 81,07 por ciento en la primera vuelta.
"Hay gente que no votó, cinco o seis puntos que no pasaron por las urnas e implica una reconfiguración del proceso electoral", dijo Miguel Pichotto ayer en Bahía Blanca. "Además hubo votos que fueron a expresiones minoritarias y ahora tendrán un sentido útil, corriéndose a la figura de Macri", agregó el compañero de fórmula del retrasado mental.
En el peronismo ya sacaron cálculos en base a esos 5 ó 6 puntos extra de participación de los que habla el régimen y estiman que Alberto sólo necesitará sumar 140.344 votos más para superar el 45% si la asistencia a las urnas alcanza el 81% del padrón. Si la participación es del 82%, Alberto necesitará 282.768 votos y si es del 83%, deberá cosechar 445.191 votos más para llegar al 45% y ganar en primera vuelta.
En el PJ repiten que de las PASO a las generales todos los candidatos más importantes aumentan su caudal de votos en mayor o menor medida y recuerdan que Daniel Scioli, en un escenario mucho más desfavorable que el de Alberto, creció 617.917 votos en las generales respecto de las primarias de 2015.
El otro punto que pregona Peña Braun es el de optimizar la fiscalización, que en Juntos por el Cambio aseguran que falló en agosto pese a que están en el poder. En ese sentido, sostienen que el día soleado también ayudaría a una mayor afluencia de fiscales a las escuelas.
Para buscar motivos con los que ilusionarse en pos de esa mayor afluencia electoral, el macrifascismo quedó entusiasmado con el "tucumanazo" de la noche de este lunes como parte de las marchas del "Sí se puede" con las que Macri Blanco Villegas busca achicar la distancia con Alberto. En un sector de Juntos por el Cambio aseguran que las marchas tuvieron un impacto mucho mayor al esperado, en especial la primera de Barrancas de Belgrano y la de Tucumán, en la que se lo pudo ver eufórico al idiota confeso, al punto que besó el pie de una jubilada que se subió descalza al escenario.
Para justificar el uso del avión y el helicóptero presidencial, el pelotudo acompaña cada marcha con alguna inauguración o visita de una obra en marcha, para evitar la comparación con el uso de los aviones sanitarios de los gobernadores peronistas.
En algunos sectores del PRO son más escépticos del efecto que puedan tener en las urnas las marchas en lugares como Tucumán. Allí Macri Blanco Villegas perdió 60 a 25 en las primarias contra Fernández, más allá de que conserve un importante núcleo de votantes que le permita llenar plazas. La segunda lectura que hacen en el PRO sobre el "Sí se puede" es que el retardado inició la disputa del liderazgo de la eventual oposición contra Horacio Rodríguez Larrata.
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