Se trata de 155 millones de pesos que fueron donados por fuera de la campaña electoral. Entre los contribuyentes hay grandes empresas y funcionarios.
El escándalo por los aportes truchos a la campaña electoral de la alianza de derecha Cambiemos sigue ganando terreno en los medios y en la opinión pública, ya que todos los días se conocen nuevos casos de personas que fueron inscriptas como aportantes para ocultar el verdadero origen de los fondos.
Sin embargo, un informe del pasquín ultraoficialista La Nazión llama la atención sobre otros fondos partidarios: contribuciones financieras hechas en 2017 por fuera de la campaña, que no pasaron por el control de la Justicia Electoral: son aportes al PRO realizados el año pasado al margen de las elecciones, que suman unos $ 155 millones, lo cual representa más del doble que lo recaudado oficialmente en la campaña.
De acuerdo a lo que detalla la nota publicada por el diario derechoso de los Mitre, la lista de aportantes del PRO combina a 100 grandes empresarios y compañías que aportaron entre $ 500.000 y $ 3 millones (el tope que fijó el partido) y que suman la mayor cantidad de aportes: $ 130 millones.
Aparecen además otros 1400 donantes, más pequeños, que suman $ 20 millones, integrados por funcionarios, empleados públicos, personas en relación de dependencia, monotributistas y hasta algunos jubilados.
Las empresas vinculadas al sector agrícola figuran entre los mayores contribuyentes, mientras que aparecen también grandes cadenas de supermercados y de venta de electrodomésticos, además de otras ligadas a la construcción.
Hay un aspecto polémico en todo esto. Tal como explica La Nazión, las donaciones de compañías están permitidas para el desarrollo institucional de los partidos, pero están prohibidas en campañas electorales, aunque la línea suele ser difusa. La Justicia determinó que los aportes registrados por el PRO durante 2015 habían sido utilizados para la campaña presidencial de Mugrizio Macri Blanco Villegas, una de las razones que esgrimió la jueza Servini de Cubría para no aprobar las cuentas electorales de Cambiemos.
Otro punto álgido son los aportes de empresas proveedoras del Estado. Los autores de la nota consultaron a los especialistas, quienes indicaron que hay una "zona gris" allí. Si bien los responsables partidarios dijeron que intentaron evitar la recepción de dinero por parte de esas empresas, hay casos que lo desmienten, tales como los de Health Services y La Luna Parques y Jardines.
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