Mientras bloqueaban las salidas del Sindicato Metalúrgico los militantes del PT y simpatizantes del ex mandatario brasileño cantaban consignas contra el juez Moro.
El ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva intentó ayer dejar el sindicato de metalúrgicos en el que está recluido desde el pasado jueves, para partir hacia Curitiba y cumplir con la orden de detención dictada por el juez Sergio Moro, tal cual lo adelantó más temprano en su discurso ante una multitud de simpatizantes.
Sin embargo, pese a las maniobras de distracción de los encargados de seguridad de su custodia que incluyeron dos autos negros y uno gris en el que finalmente se subió Lula, el ex mandatario no logró pasar la barrera de militantes que intentan disuadirlo de que no se entregue.
Mientras bloquean las puertas, los seguidores de Lula cantaban “Moro quer lula, vem buscar então!” ("Moro, querés a Lula, ven a buscarlo entonces").
Los cánticos fueron dedicados al juez que dictó contra el líder del PT el cumplimiento una condena a 12 años de prisión por la falsa adquisición de un departamento mediante una operación que Moro interpreta que fue producto de un soborno, pero del que nunca se presentaron pruebas.
Los seguidores del PT se enccontraban detrás de la valla que permite la salida del automóvil y no permiten su avance. Ante esta situación, Lula debió retormar al edificio para evitar desmanes luego de varios minutos en que su custodia intentó negociar con los simpatizantes sin éxito.
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