En una jornada signada por varios focos de protestas en la ciudad de Buenos Aires, miembros del cuerpo de Infantería de la Policía de la Ciudad se enfrentaron con manifestantes que se movilizaban hacia la sede Ministerio de Desarrollo Social, en la avenida 9 de Julio y Moreno.
El conflicto se desató poco después de las 16 cuando los integrantes de agrupaciones sociales que venían circulando por la 9 de Julio quisieron acaparar y bloquear el paso también en el Metrobus, lo cual generó la respuesta de los efectivos de la fuerza de seguridad que intentaron impedirlo.
Hubo gritos, corridas, empujones, golpes, enfrentamientos cuerpo a cuerpo, gases lacrimógenos y pedradas. Algunos manifestantes resultaron heridos.
"Tengo la cara totalmente afectada, con muchos golpes. Hay detenidos y muchos compañeros lastimados que están siendo atendidos. Queremos que nos convoquen a una mesa de diálogo y dejen de reprimir. La represión no logró nunca nada en ningún lugar del mundo", dijo tras los incidentes Eduardo Belliboni, referente del Polo Obrero, que recibió atención médica.
Desde la Policía informaron que solo uno de los manifestantes fue detenido, mientras que dos oficiales sufrieron diferentes lesiones.
El propio Belliboni había anticipado el martes la intención de distintos agrupaciones de acampar durante 48 horas frente a la sede ministerial en reclamo de la "apertura de los programas sociales, asistencia a los comedores populares y aumento de salario que equipare la inflación que sufrieron los trabajadores".
En ese sentido, los manifestantes se reunieron en la intersección de las avenidas 9 de Julio y De Mayo y poco antes de las 16 iniciaron la movilización hacía Desarrollo Social. Desde allí empezaron la caminata. Hasta que de repente, un nutrido grupo se desprendió de la concentración y quiso ampliar el corte: coparon el Metrobus y también los carriles de la mano hacia el norte de la 9 de Julio. Esto originó los incidentes.
Fuentes policiales indicaron que previo a la marcha "desde el Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad mantuvieron charlas con los representantes de las organizaciones sociales que lideran las protestas y habían acordado que no se iba a permitir cortar el Metrobus, para no perjudicar a los trabajadores que utilizan el transporte público".
Sin embargo, "hubo algunas organizaciones que no participaron del diálogo y son las que ahora intentan generar cortes totales", agregaron las mismas fuentes.
Desde la fuerza indicaron que "no hay problemas con el acampe pero no se puede permitir que en 48 horas de movilización se interrumpa el transporte público. Se va a garantizar la libre circulación".
Los incidentes se prolongaron durante varios minutos. Varias ambulancias del SAME llegaron hasta el lugar para atender a los afectados. Finalmente los integrantes de los movimientos piqueteros se posicionaron frente al edificio de Desarrollo Social en medio de una tensa calma. Según anunciaron, montarán carpas, ya que la protesta se extenderá por dos días.
Esta manifestación se suma a otra que se realizó en Plaza de Mayo, adonde militantes del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), el Frente Popular Darío Santillán, la Corriente Nacional MTD Aníbal Verón y la Federación de Organizaciones de Base FOB marcharon desde el ministerio conducido por Carolina Stanley para participar de la jornada nacional de lucha con ollas populares, que se replicará en 17 provincias.
También frente a Casa Rosada, distintos gremios docentes llevaron a cabo su Jornada Nacional de Lucha con la consigna "Con hambre no se puede enseñar ni aprender", en el marco del Día del Maestro.
Tras la represión, acampe frente a Desarrollo Social
Luego de los incidentes, los movimientos sociales instalaron el campamento por 48 horas frente el edificio de Desarrollo Social, a la espera de la sesión especial del Congreso en la que se tratará la Ley de Emergencia Alimentaria y para insistir con la reapertura del diálogo con la ministra Carolina Stanley.
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