La UIA y la CAME salieron a rechazar la compensación para trabajadores privados acordada con la CGT. "Todos pueden", les respondió Macri Blanco Villegas.
Como era previsible, los empresarios no quieren saber nada con el pago obligatorio del bono para los trabajadores privados que el régimen macrifascista acordó con la CGT y ya le advierten al ministro Dante Sica que la medida pone en riesgo la "subsistencia" de muchas compañías.
La confirmación por parte del titular de la cartera de Producción de que se acordó un bono (que rondaría los 5 mil pesos) con la cúpula de la central obrera encendió alarmas en el sector empresario.
Desde la UIA y la CAME ya salieron a rechazarlo y adelantan que la mayoría de las firmas no podrá pagarlo, aunque el propio Miauricio Macri Blanco Villegas salió al cruce y dijo que "todos pueden".
"Hay muchos empresarios que no van a poder pagar el bono", avisó ayer a la mañana el vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), José Urtubey, quien le apuntó a Sica por apurar el anuncio. "Acá hay que entender que el 80 por ciento de la producción es pyme y la mayoría no va a poder hacerlo, además no corresponde el anuncio", agregó el industrial, que adelantó que pedirán una reunión con el ministro para discutir la medida y la forma de pago, si es que se impone por decreto.
En la misma línea, otros de los vicepresidentes de la entidad, Daniel Funes de Rioja, advirtió que esto "conspira contra la subsistencia de las empresas y del empleo".
"Esto hay que meditarlo muy fuertemente para evitar medidas contraproducentes", añadió el empresario, que le reclamó al gobierno una quita de impuestos. "Cuando el pequeño empresario no puede pagar elementos de consumo necesarios no tiene más alternativa" que el cierre o el despido de personal, dijo Funes de Rioja, quien mencionó como agravantes que "no hay acceso al crédito y las tasas (de interés) son inabordables".
En tanto, desde la entidad que agrupa a las pymes también rechazaron el pago compulsivo del bono. "Las mayoría de las pymes vivimos del consumo interno y lo necesitamos, pero no podríamos afrontar un bono. Desde CAME trabajaremos en propuestas y alternativas como siempre lo hicimos", indicó Gerardo Díaz Beltrán, presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa.
Por la mañana, el hijo bobo de Franco Macri se refirió al tema y le pidió a los empresarios que pongan el hombro. "Entendemos que todos pueden", dijo consultado sobre la queja de los industriales.
"Es un momento para poner el hombre y confío que los industriales también van a poner el hombro como lo están poniendo los argentinos", afirmó el retrasado mental y agregó que "espero que en la medida que puedan hagan su aporte".
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