“Es la primera vez en la historia que se pretende crear una universidad con vallas y tirando gases. Pedimos diálogo, las reformas educativas deben hacerse con consenso”, sostuvo Eduardo López, titular de UTE-Ctera, desde la puerta de la Legislatura mientras efectivos de la policía porteña tiraban gases lacrimógenos a los manifestantes que protestaban contra la UniCABA.
En el recinto, los legisladores debatían el proyecto oficialista que planea la creación de un nuevo ente que definirá el destino de los 29 profesorados docentes, algunos con más de 130 años de antigüedad.
Aunque el proyecto no contaba con el apoyo de ningún diputado de la oposición, la fuerza del oficialismo en la ciudad, Vamos Juntos, lograría convertir en ley el proyecto con sus 34 legisladores propios.
“Pretenden aprobar la ley a espaldas a la comunidad educativa. Me recuerda a la Ley Federal de Educación de los '90 que se sancionó por cuatro votos igual que ahora y disolvió la primaria y la secundaria por el EGB y un polimodal. ¿Quién se acuerda? Se tuvo que volver atrás porque las reformas educativas que no tienen consenso fracasan”, remarcó el dirigente, que informó que un estudiante del profesorado de historia del Joaquín V. González había sido herido y estaba recibiendo atención médica.
López le contestó a la ministra de Educación, Soledad Acuña, que acusó a los docentes, rectores y gremios de sentirse los dueños de los institutos. “Los 29 profesorados funcionan hace 130 años nosotros no tenemos el poder sólo queremos que la comunidad educativa tenga opinión”, agregó en declaraciones a la prensa. Asimismo, informó que las 29 rectoras se oponen al proyecto, igual que los docentes y los estudiantes.
Actualmente los profesorados se manejan de manera autónoma y sus directores son seleccionados por concurso y por elección de docentes, estudiantes y egresados. El nuevo proyecto crea una comisión evaluadora, que determinaría la continuidad o no de cada profesorado. Este instituto estaría en manos de un funcionario designado por el Poder Ejecutivo porteño.
“Queremos que los profesorados no estén bajo el arbitrio del poder de turno ni del sindical y para eso tiene que haber leyes, concursos y claustros. Quién va a decir decidir si el Joaquín V. González continúa o no. Si sale esta ley lo va a decidir el presidente de esta Comisión de Evaluación, que puede ser un empresario o un político y se va a basar en una prueba estandarizada”, remarcó López.
Por último, el dirigente señaló que los docentes no se oponen la actualización y modernización de los profesorados. De hecho, reclaman la incorporación de mayor tecnología. “Les pedimos a los gobiernos que doten a los profesorados de las herramientas pero descontinuaron las netbooks por ejemplo”, agregó.
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