"Que nunca más se pueda decir que la escuela pública es un lugar donde se cae", dijo en alusión a Macri Blanco Villegas. Demostrando que son soretes mal cagados, los intendentes de Juntos por el Cambio no firmaron.
Se trata de un convenio de la provincia de Buenos Aires con diferentes municipios para arreglar escuelas que están en estado de emergencia, una inversión inicial de más de 800 millones de pesos.
"Que nunca más se pueda decir que la escuela pública es un lugar donde se cae", dijo en un encendido discurso en el que buscó contrastar el inicio de su gestión con la de María Eugenia Vidal. Fue en Merlo, junto al intendente Gustavo Menéndez y los ministros de Educación Nicolás Trotta (nacional) y Agustina Vila (bonaerense).
"La escuela pública a los y las bonaerenses es lo que los levanta, lo que los impulsa, lo que salva la vida, las trayectorias y los futuros. Queremos recuperar no solo los edificios sino el lugar prioritario que tiene que tener la educación en la provincia", siguió.
El anuncio fue la puesta en marcha de un plan para refaccionar escuelas bonaerenses. Como detallaron fuentes de la provincia, la idea es en una primera etapa, obras en 818 escuelas con riesgo de inicio del ciclo lectivo 2020.
El dinero para arrancar el programa vendrá de la Provincia y del Fondo Educativo. La idea es que los trabajos se lleven adelante entre la provincia y los municipios, por lo que varios intendentes firmaron ayer el principio de acuerdo. De Juntos por le Cambio estuvieron presentes Jorge Macri, Julio Garro y Sebastián Abella, pero ninguno de los tres firmó el convenio.
"No firmaron el convenio por ser genérico y no contar con especificaciones de las obras", aseguraron desde Juntos por el Cambio. También remarcaron que fue distinta la postura que adoptaron intendentes de la UCR que -con la excepción de Gustavo Posse- ya suscribieron al acuerdo. "Firmaron sobre todo los radicales del interior, movilizados por Miguel Fernández de Trenque Lauquen", se quejó un dirigente macrifascista del conurbano.
"Hoy (por ayer) firmaron un convenio marco que da un marco institucional al trabajo mancomunado. La dirección nuestra va a trabajar con todos los municipios, los que hayan firmado y los que no. Este convenio marco viene a mostrar esta voluntad de seguir trabajando juntos en la infraestructura escolar", dijeron desde el área que comanda Vila.
También explicaron que el objetivo es que haya una "modalidad participativa" y que en cada distrito habrá diferentes modalidades y esquemas de trabajo
En paralelo a estos trabajos de urgencia para escuelas en "riesgo", Kicillof explicó que el programa tiene otra línea que es que los "trabajadores de la economía popular" se sumarán para pintar y poner a punto "escuelas que necesitan reparaciones menos urgentes pero también importantes, para que los chicos inicien con las escuelas en condiciones".
Según la provincia, hay 243 obras que se encuentran actualmente abandonadas o paralizadas. "En muchos municipios nos encontramos con esqueletos comenzados en jardines y escuelas. Hoy nos proponemos terminar todas las obras iniciadas, de forma progresiva pero sistemática", prometió el gobernador.
Es en ese punto donde tendrán participación las cooperativas, los beneficiarios de planes y algunas escuelas chicas, que se suman a este plan previo a arrancar las clases. De hecho, Kicillof presentaró esta segunda parte del programa ayer mismo por la tarde en Moreno con Alberto Fernández.
Los trabajos apuntan a la reconstrucción de techos, sanitarios, instalaciones eléctricas, de gas, y agua potable, como también trabajos de pintura y reparaciones estructurales. En la provincia aseguran que la cartera que conduce Vila está desarrollando un sistema informatizado -que será de acceso público- para monitorear de forma continua el estado de las escuelas.
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