Una patota del derrotado en las elecciones del gremio intentó bloquear ayer a la mañana el recambio de autoridades.
Las oficinas centrales del Sindicato de Comercio, en el centro de la ciudad de Buenos Aires, fue escenario ayer a la mañana de serios incidentes cuando un grupo de seguidores del opositor Ramón Muerza, que perdió las elecciones de septiembre, intentó impedir la asunción de Armando Cavalieri para un nuevo mandato.
La sede gremial ubicada en la calle Moreno apareció vallada ante la posibilidad concreta de que nuevamente se registren incidentes, luego de que las elecciones de septiembre Muerza y su grupo tomaron el sindicato en varias oportunidades, convocaron movilizaciones e incluso se enfrentaron con personal de seguridad.
Más allá de los recaudos, los opositores tiraron abajo el vallado y avanzaron sobre el frente del edificio, donde hubo fierrazos, piedras, vidrios rotos y matafuegos que se abrieron desde adentro para dispersar a los manifestantes.
"Hoy se vencen los mandatos de la autoridades del sindicato comienzan los nuevos mandatos. Muerza se resiste a aceptar el resultado electoral y quedarse sin nada", dijeron fuentes gremiales en declaraciones a la prensa.
Muerza (que tuvo el apoyo explícito del supermercadista Alfredo Coto y de Horacio Rodríguez Larrata) desconoce el resultado de las elecciones de septiembre, donde la lista oficial lidera por Cavalieri se impuso por un ajustado 52% de los votos.
En la oposición dicen que hubo fraude. Previamente, también habían denunciado irregularidades en los padrones, lo que la Justicia determinó que era falso.
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