El ex hijastro de Flavia Palmiero se mantuvo aislado del conflicto, aunque no pudo ocultar la enorme tristeza por los episodios de inseguridad en la final de la Libertadores.
Dentro de lo pudo, trató de mantenerse aislado. Decidió no involucrarse en la resolución del papelón menos conveniente a cinco días del inicio de la cumbre internacional más importante que jamás se haya realizado en la Argentina.
Hay rumores que decían que había hablado con Giovanni Infantino, el abogado italiano que se naturalizó suizo y preside la FIFA desde 2016, mientras todavía estaba en el estadio Monumental. Pero no es cierto. Cerca de Mugrizio Macri Blanco Villegas aseguran que "esta vez tuvo cero contacto".
Igual, no pudo ocultar la enorme tristeza que le generó lo sucedido y aunque nadie de su entorno se haya animado a confirmar que el retrasado mental haya hablado con los principales líderes del mundo para garantizar la seguridad del G20, todo indicaría que así fue y solo recibió respaldo en cada uno de los contactos internacionales que realizó.
Es más, en el régimen se asegura que "nunca peligró la realización del G20, ni siquiera en los momentos en que las pantallas de la televisión mundial se transmitía en directo los desmanes de barras bravas enojados porque no se les permitía entrar a ver la final" de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors.
El diagnóstico en el equipo presidencial es, justamente, ese: "nosotros nos preparamos con altísimo profesionalismo durante un año y medio en organizar un sistema seguro, siguiendo los más exigentes protocolos en materia de protección de grandes cumbres mundiales, y no dudamos de la efectividad técnica y logística. Lo que pasó en los alrededores del barrio de Núñez tiene que ver con los lazos entre barras bravas y efectivos y ex efectivos de la Policía de la Ciudad, seguramente con lazos entre los clubes, la política y la Justicia, que apañan todo y quieren seguir actuando en la ilegalidad".
Un amigo de Macri Blanco Villegas, incluso, agregó una visión. "Hay varias Argentinas: la competitiva que está preparada para la integración al mundo, la que no tiene miedo a rendir los más exigentes exámenes, y la oscura, que tiene lazos nefastos con lo peor de las mafias que no fueron controladas ni puestas a disposición de la Justicia", dijo.
La confianza es que esas dos Argentinas no se crucen en la próxima semana, o lo hagan a distancias que no pongan en tela de juicio la seguridad de los más de 30 líderes de los principales países del mundo, los que concentran el 85% del Producto Bruto global y el 80% del territorio mundial.
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