Así lo dijo, casi como pidiendo disculpas, uno de los integrantes del "combativo" triunvirato que encabeza la CGT. "No pueden decir que uno no da posibilidades. Tuvieron más de 20 días para empezar a dar respuestas y no las dan", argumentó.
Uno de los integrantes del triunvirato que encabeza la CGT, Carlos Acuña, dijo que finalmente se realizará el lejanísimo paro general convocado para el 25 de septiembre próximo.
"Uno tiene un mandato para que el gobierno revierta situaciones. No pueden decir que uno no da posibilidades.Tuvieron más de 20 días para empezar a dar respuestas y no las dan", declaró el dirigente en extrañas definiciones, casi como pidiendo permiso para generar una medida de fuerza.
En declaraciones a FM Futurock, el secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio agregó que "inevitablemente vamos al paro".
Más tarde sostuvo que "el resultado de esta medida de fuerza va a ser contundente. No solamente por la organización de los gremios sino porque el estado de la sociedad es deprimente".
Dijo además que "lo que más duele es la insensibilidad del gobierno con respecto a la pérdida del poder adquisitivo" porque, según sostuvo, "hay actividades que se están fundiendo".
"Siempre estamos abiertos al diálogo, se ha visto desde que asumió el Gobierno. Pero si no se ejecutan las políticas a favor del sector trabajador, de la industria nacional y en defensa del poder adquisitivo y los salarios, las mesas de diálogo no sirven para nada. Todo el mundo pide un cambio de rumbo en la política económica", sostuvo.
"La reforma laboral es un eslogan. ¿Qué quieren reformar? Perjudicar a los trabajadores, no existe una a favor. El gobierno tiene que resolver y ocuparse de la timba financiera", disparó el dirigente con algo más de vehemencia. "No hay posibilidad de discutir una reforma laboral", sentenció.
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