También abandonará la bancada que hasta ahora conducía el puntano su coprovinciana Eugenia Catalfamo. Desde el entorno del senador descartaron un acercamiento formal al bloque del Frente para la Victoria.
"Esto es el peronismo. Primero va a estallar todo y después se va a ir reacomodando", sintentizó una fuente que conoce desde hace años los pasillos del Senado. El análisis responde a una nueva fractura del amplio entramado peronista en el Senado.
En este caso, en el interbloque federal, que sufrió la renuncia de su presidente, el senador puntano Adolfo Rodríguez Saá. Detrás suyo se irá también su coprovinciana Eugenia Catalfamo, la senadora más joven de la cámara. Por el momento, ambos mantendrán su bloque "Justicialista San Luis" y sus voceros descartan un acercamiento (al menos formal) con el Frente para la Victoria-PJ, con el que habían armado una alianza en las últimas elecciones.
El portazo de Rodriguez Saá del peronismo federal tiene un disparador concreto. El puntano integró hasta el 10 de diciembre la comisión bicameral de trámite legislativo (encargada de analizar los decretos y DNU que firma el presidente Mauricio Macri) pero luego fue desplazado por otra senadora, la salteña María Fiore Viñuales, que responde almarido de Isabel Macedo, Juan Manuel Urtubey, notoria afinidad con la Casa Rosada. El trabajo de esa comisión es clave para el régimen macrifascista y de hecho, en una votación pareja, ayer el oficialismo logró dictaminar a favor del controvertido DNU de reforma del Estado que modifica unas 120 leyes y deroga otras 40.
Según pudo saberse, Rodríguez Saá presentó el 1º de febrero una nota ante la presidenta de la Cámara, Gabriela Michetti, para que mantener su lugar en la bicameral, lugar que no se le respetó. Además, el ex gobernador puntano realizó gestiones ante el presidente provisional, Federico Pinedo, que tampoco dieron resultado. Si bien Fiore Viñuales votó en contra del DNU de Macri Blanco Villegas el último martes, los motivos de la Casa Rosada son claros: la senadora salteña está alineada con Urtubey, fiel defensor de las políticas oficiales, mientras que tanto Adolfo como Alberto Rodríguez Saá, mantienen un tono cada vez más crítico de la gestión de la alianza de derecha Cambiemos. Lo paradójico en este caso es que Fiore Viñuales integra el mismo interbloque que preside Rodríguez Saá.
Tras las elecciones de octubre, el interbloque peronismo federal había quedado con 7 miembros, aunque sus integrantes mantenían posturas relativamente heterogéneas: Rodríguez Saá, Catalfamo, Lucila Crexell y Guillermo Pereyra (MPN-Neuquén) representaban un ala más crítica, mientras que Juan Carlos Romero (Salta), Carlos Reutemann (Santa Fe) y Fiore Viñuales son los más cercanos al oficialismo. El interbloque quedaría ahora con 5 integrantes y, si bien no se formalizó, su presidencia podría quedar en manos de Romero, un hombre del consevadurismo-liberal del PJ, afín a la Rosada.
Fuente: nota de Sebastián Abrevaya para Página/12
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