El expresidente brasileño mantuvo un cálido encuentro con el Sumo Pontífice en Santa Marta "para hablar sobre un mundo más justo y fraterno".
Lula da Silva se reunió ayer con el Papa Francisco en el Vaticano, en la residencia de Santa Marta. Fue un encuentro privado que duró aproximadamente una hora "para hablar sobre un mundo más justo y fraterno".
Así lo definió el ex presidente brasileño, quien se juntó con Sumo Pontífice por primera vez luego de salir de prisión. El Papa se había encargado de enviar diversos mensajes hacia Lula mientras este se encontraba en la cárcel.
Lula Da Silva se encuentra desde el miércoles en Roma. Según agencias de noticias del exterior, el ex mandatario entró en el Vaticano a bordo de un monovolumen gris por la Puerta del Perugino, que da acceso a la residencia del pontífice, Casa Santa Marta, donde tiene sus reuniones más informales, alejadas del protocolo de palacio.
Luego, el ex mandatario escribió en su cuenta personal de Twitter acompañado con dos fotos de su reunión con Francisco. Allí tuiteó: “Un encuentro con el Papa Francisco para conversar sobre un mundo más justo y fraterno”.
Lula pasó 580 días preso y se encuentra en libertad provisional. El líder del Partidos de los Trabajadores de Brasil está condenado en dos procesos y tiene al menos otras siete investigaciones abiertas en su contra.
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