El gobernador electo trata de evitar la profundización de la crisis. En la reunión que mantuvo ayer con la actual gobernadora fascista para coordinar el traspaso le planteó que la situación bonaerense es "crítica" y le reclamó que frene la nueva suba del 12% de la luz.

“Le pedí que retrotraiga el aumento tarifario” y que analice “cómo está la gente y el nivel de ganancias de las empresas”, dijo el dirigente del Frente de Todos a la salida de la primera reunión de transición que tuvo lugar ayer en la Casa de Gobierno provincial.
Kicillof sostuvo que “las tarifas tal como están son impagables” y aclaró que la respuesta a su pedido de retrotraer ese aumento quedó en manos de Vidal. “La que tendrá que responder es ella”, planteó.
También “le pedí que cuide la situación de la provincia en las áreas críticas” para que “la llegada del próximo gobierno sea lo menos traumática”. Añadió que “le pedí que este mes no se tomen decisiones que afecten la gestión que viene”.

“Hablamos de la cuestión económica y de la deuda, y va a haber una reunión entre los equipos de transición, la semana que viene o lo antes posible”, dijo y agregó de parte del régimen saliente “hay buena predisposición” para trabajar.
En el diagnóstico puntualizó que se detectaron algunas “fragilidades” e indicó que las más importantes son “la cuestión de la deuda, el (presupuesto de) cierre del año, y la situación de emergencia laboral, educativa y sanitaria”.
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