Hubo una fuerte volatilidad del mercado paralelo durante toda la jornada de ayer, pero siempre con una tendencia de ampliación de la brecha.
Luego del triunfo de Alberto Fernández y del endurecimiento del cepo por parte del régimen macrifascista, el dólar abrió con una baja de más de un peso tanto en el Banco Nación como en un segmento mayorista en el que prácticamente no se observaron operaciones.
Como era de esperarse, la reducción del límite de compra a sólo 200 dólares por mes vació al mercado cambiario y permitió una jornada de relativa tranquilidad en el Banco Central tras una intensa semana donde sufrió una notable pérdida de reservas al tratar de sostener el precio de la divisa.
En tanto, el mercado paralelo presentó una fuerte volatilidad con una clara tendencia a una ampliación de la brecha respecto al tipo de cambio oficial.
"El endurecimiento del cepo puede ayudar a contener el dólar oficial, pero va a jugar con brecha creciente sobre todo en un contexto en el que hay expectativas de emisión monetaria del Banco Central para cerrar la brecha fiscal de diciembre y donde la demanda de dinero no está estabilizada y sigue cayendo", explicó el director de Eco Go, Federico Furiase.
Así, el billete cerró a $ 59,50 en el mayorista, a $ 63,45 en promedio minorista -un peso y 55 centavos menos que el viernes-, a $ 77,80 en el MEP y a $ 81,77 en el contado con liquidación.
Por su parte, el riesgo país subió a 2.174 puntos básicos, y los ADRs de las principales firmas argentinas en Wall Street sufrían un retroceso de hasta el 12%.
"En principio no esperaba un día negativo. El resultado fue bastante parejo y la combinación en las cámaras puede ser leída positivamente. Pero el cepo lo cambio todo", aseguró el analista financiero Christian Buteler. "Un cepo tan restrictivo muestra a las claras la gravedad de la situación y eso puede asustar mucho a los mercados", agregó.
Los papeles más golpeados fueron los de Edenor (-12,20%), Banco Galicia (-12,73%), Macro (-9,46%), Francés (-8,79%), Irsa (-6,92%) y Telecom (-7,24%), pero de todos modos en las próximas semanas su evolución dependerá de las señales económicas que empiece a dar el equipo económico del presidente electo y la conformación del gabinete.
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