De los mensajes de Telegram surge que Moro les dijo a los fiscales que pidan penas mínimas para los empresarios arrepentidos de la empresa Camargo Correa.
Nuevas filtraciones permiten ver la interferencia ilegal del Juez Sergio Moro en la actuación de los fiscales de la causa Lavo Jato. Los mensajes del grupo de Telegram de los fiscales muestran como Moro les pidió penas mínimas para los empresarios arrepentidos de la empresa Camargo Correa, según reveló el sitio Folha de San Pablo, que trabaja junto a The Intercept en las filtraciones.
Esto supone una intervención ilegítima del Juez, ya que la normativa para los acuerdos de “delación premiada”, como se conoce en Brasil a los “arrepentidos”, establece que los jueces no pueden participar en las negociaciones, sino que deben esperar a que los acuerdos estén firmados para determinar la legalidad de los mismos, sostiene el diario paulista.
El objetivo de esta normativa que habría imcumplido Moro es que los jueces sean imparciales para evaluar tanto la información obtenida por los fiscales, así como los beneficios que se les dan a los arrepentidos por prestar declaración. Moro intervino en el proceso legal en una etapa donde aún los fiscales estaban llevando adelante las negociaciones. El Juez les avisó que sólo validaría las delaciones si las penas propuestas para los ejecutivos de Camargo Correa eran de al menos un año de prisión en un régimen cerrado.
Esta interferencia de Moro en la causa generó molestias en algunos de ellos, en momentos donde debatían sobre la mejor forma de usar las acusaciones para llevar adelante la investigación.
Dallagnol, Procurador y jefe del grupo de trabajo de la causa Lava Jato, puso en conocimiento de Carlos Fernando dos Santos Lima, el encargado de llevar adelante las negociaciones con los empresarios de Camargo Correa, lo que Moro quería: que los arrepentidos sean condenados a un año de prisión. De esa forma esperaba que tome en cuenta la decisión del Juez. Además, el Procurador se mostraba preocupado por la reacción de Moro ante las negociaciones, y por el efecto que pudiera tener en la opinión pública que otorguen beneficios excesivos a los empresarios.
Mensajes del 23 de febrero de 2015 exponen que Dallagnol sugirió a Santos Lima que aprovechase una reunión con Moro para consultarlo sobre las penas propuestas a los delatores. “Como sugerencia, sería bueno sondear a Moro sobre los niveles establecidos”, se lee en el mensaje de Dallagnol revelado por Folha.
Para el fiscal Santos Lima la injerencia del Juez impedía llevar adelante las negociaciones de manera fluida, lo que impediría abrir nuevas líneas de investigación. Sin embargo Dallagnol lo presionó para que tomara en cuenta la voluntad del juez. “¿Querés llevar adelante los acuerdos con Camargo Correa incluso aunque Moro no esté de acuerdo?”, puede leerse en uno de los mensajes enviado por Dallagnol al fiscal. “Creo que es peligroso para nuestra relación seguir sin HABLAR con él, lo que no significa que lo seguiremos”, concluye el Procurador.
Finalmente la opinión de Moro fue respetada. Dos días después se acordó que los ejecutivos de Camargo Correa, Dalton Avancini y Eduardo Leite, fueran encerrados por un año.
Las filtraciones se remonta al 9 de junio de este año cuando The Intercept publicó conversaciones mantenidas en un grupo de Telegram entre el Procurador Deltan Dallagnol y su grupo de trabajo. En esas conversaciones el Juez Moro logró presionar al Procurador para cambiar el orden de las fases de la operación Lava Jato y dio consejos a los fiscales, algo que también está prohibido por la ley.
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