Detuvieron a los dos atacantes de Olivares y Yadón

Juan José Navarro es el presunto autor de los disparos y fue detenido en Uruguay. Más temprano había sido arrestado en Entre Ríos Juan Jesús Fernández, dueño del auto utilizado para el ataque. Se cree que se trató de un ajuste de cuentas por temas personales. Bullrich Luro Pueyrredón celebró que fue detenido “todo el ‘clan mafioso de gitanos’” y que "el que las hace, las paga".

Juan José Fernández, "el Gitano", al ser arrestado en Concepción del Uruguay (Entre Ríos)

Juan Jesús Fernández, dueño del auto desde el que se hicieron los disparos que hirieron al diputado Héctor Olivares y mataron al funcionario Miguel Yadón fue detenido ayer a la mañana en la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay. 

Pocas horas después fue arrestado, en la República Oriental del Uruguay -por parte de agentes de Interpol del país vecino-, Juan José Navarro, señalado como el autor de los disparos.

Fernández, un cocinero conocido como "el Gitano", era buscado desde el jueves, cuando los investigadores pudieron reconstruir cómo fue el ataque que terminó con la vida de Yadón y por el cual Olivares, diputado radical por La Rioja, permanece internado en el Hospital Ramos Mejía.

Las imágenes de las cámaras de seguridad fueron centrales para el esclarecimiento del hecho. En ellas se ve claramente el auto que utilizaron, que pertenece a Fernández.

"El Gitano" era quien conducía el auto usado para el ataque, pero no estaba claro que fuera el autor de los disparos. La principal hipótesis es que quien disparó fue Juan José Navarro, el joven que lo acompañaba. En principio se suponía que sería su hijo o su sobrino, pero en las últimas horas cobró fuerza la versión de que se trata del marido de Estefanía, la hija de Fernández. La mujer, de 24 años y madre de dos hijos, había sido detenida también ayer a la mañana.

Si bien se creía que podían haber huido hacia la costa atlántica, Fernández fue detenido en Entre Ríos, cuando viajaba con otra persona de nacionalidad española, identificada como Miguel Fernández Navarro, en un Renault 19 color gris. Fue interceptado por la policía entrerriana poco después de las ocho y media de la mañana. 

Al momento de su detención, "el Gitano" estaba vestido con la misma ropa que tenía al momento del ataque en Congreso.

El otro sospechoso fue arrestado horas más tarde en Uruguay con intervención de Interpol. Navarro es argentino y tiene 26 años. Había cruzado al país vecino por Colón, Entre Ríos, a la 1.49 de la madrugada de ayer.

El cerco sobre los sospechosos terminó de cerrarse tras las detenciones que se produjeron más temprano ayer a la mañana. Por la madrugada había sido arrestado por la Policía Federal Luis Cano, familiar de Fernández. Y luego fue apresada su hija Estefanía. Los investigadores dan por hecho que el móvil del ataque es la relación que Yadón habría establecido con la joven de 24 años y también de nacionalidad española.

La detención de familiares de Fernández comenzó el mismo jueves, con el arresto de Rafael Cano Carmona, quien tenía una cédula azul del Vento utilizado para el ataque. Los investigadores la encontraron dentro del auto que Fernández dejó en el garage donde habitualmente estaciona, a dos cuadras de donde fueron baleados Olivares y Yadón, minutos después del hecho. Los testigos que lo vieron llegar afirman que estaba alcoholizado.

El arresto de familiares de Fernández apuntó a recabar datos acerca de sus posibles movimientos y también para poner presión sobre el prófugo. 

Fuentes de la investigación señalaron que resultaron claves los datos aportados por Cano, en un domicilio de Rivadavia al 1600, a casi doscientos metros del Congreso de la Nación, y cerca también del sitio del ataque.

“El caso está esclarecido”, dijo la beoda ministra de Seguridad, Patricia Bullrich Luro Pueyrredón, al confirmar la detención de Fernández. Luego confirmó vía Twitter que fue arrestado el otro hombre que participó del ataque y celebró la detención de "todo el 'clan mafioso de gitanos'".

Horas después del ataque, la ex montonera entregadora de compañeros había dicho que se trataba de "la constatación de las mafias que trabajan en nuestro país". El régimen macrifascisya quiso imponer un relato que 24 horas después quedó totalmente desarticulado.