La Escuela Polivalente de Arte, de Tandil, está en obra hace 37 años. A principios de septiembre, el intendente Miguel Lunghi y la representante de la Subsecretaría de Educación Florencia Castro se reunieron con los alumnos y les mostraron un contrato con un plazo de 120 días para terminar la construcción. La obra nunca se reactivó y los estudiantes tomaron el edificio.
“Un monumento a la desidia provincial”, así definieron los estudiantes de la Escuela Polivalente de Arte de Tandil a la situación del edificio donde cursan sus estudios. En realidad, el edificio cuenta con un único módulo habilitado donde las clases se imparten en salones inadecuados y entre superposición de turnos.
La obra, que comenzó en 1981, nunca terminó. En todo ese tiempo, las camadas de graduados vieron pasar un sinfín de empresas que nunca finalizaron los trabajos. La última promesa se firmó el 5 de septiembre pasado y fue el propio intendente de Tandil quien le mostró a los alumnos el contrato con un plazo de 120 días para terminar de una vez por todas con la construcción. Pero la obra nunca se reactivó y los estudiantes decidieron tomar el edificio.
El reclamo es básico: los 800 alumnos no entran en un tercio del edificio y necesitan todas las aulas para poder seguir con sus estudios. De los tres módulos que cuenta el edificio escolar, sólo uno está habilitado. Los otros dos están construidos en un 85 por ciento, pero sin fecha de final de obra. No tienen cielo raso ni inodoros ni estufas. Mientras tanto, la matricula está dividida en tres sedes: el único sector de aulas habilitadas y otros dos espacios que alquila el municipio.
Más allá de la denuncia histórica, el reclamo actual responde a un nuevo abandono: el incumplimiento del último contrato firmado el 5 de septiembre pasado por el municipio y la empresa constructora.
“Hace poco más de un mes nos reunimos con el intendente Miguel Ángel Lunghi y la representante de la Subsecretaría de Educación Florencia Castro y nos mostraron el nuevo contrato con fecha de inicio de la obra el 5 de septiembre y un plazo de 120 días para la finalización total. Pasó un mes y la obra sigue parada. Estamos cansados”, contó Sofía Reinoso, presidenta del centro de estudiantes del Polivalente.
La estudiante sostuvo que la falta de respuesta frente a los reclamos los llevó a tomar la institución. Ayer al mediodía, diferentes escuelas secundarias y terciarias de Tandil se movilizaron hasta el edificio inconcluso ubicado en 4 de abril y Sarmiento para apoyar el reclamo.
“Necesitamos una respuesta de las autoridades provinciales porque la obra y la escuela dependen de la Dirección General de Cultura de Educación y Provincia. No vamos a ceder”, reafirmó Reinoso.
La estudiante contó además que el único módulo habilitado es el de los salones especiales para el dictado de materias de arte por lo que son incómodos para cursar las materias comunes. “Son salones grandes con los hornos para cerámica o los pianos de música y se comparten entre varios cursos. Por ejemplo, nosotros comemos en un salón que usan los de cuarto”, agregó la alumna, que cursa el último año de la escuela secundaria.
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