Los tripulantes del rompehielos Almirante Irízar, que realiza su primera misión a la Antártida tras 10 años fuera de servicio, dedicaron un sentido homenaje a sus pares del ARA San Juan, desaparecidos el 15 de noviembre pasado en aguas del Atlántico Sur.
Con sus trajes naranjas característicos, los marinos fueron fotografiados desde uno de los helicópteros que acompaña su travesía, parados sobre el continente blanco formando el número 44,en representación de la cantidad de personas que viajaban a bordo del submarino.
Frente a ellos, se destaca la una bandera argentina apoyada sobre las aguas congeladas del Océano Atlántico. La imagen fue difundida a través de la cuenta de Twitter oficial de la Marina y rápidamente se viralizó en las redes sociales.
El rompehielos arribó el viernes a la Antártida para participar del abastecimiento de las 13 bases permanentes y transitorias argentinas en ese continente.
El Irízar llegó a la Base Permanente Belgrano 2, la más austral que la Argentina posee en el continente blanco, luego de diez años, dejando atrás el incendio que casi lo destruyó por completo en abril de 2007 y que lo retiró de estas misiones al continente blanco.
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