Mariana y Lorena Triaca, hermanas del ministro de Trabajo, renunciaron a sus cargos, en las primeras dimisiones tras el anuncio del ex hijastro de Flavia Palmiero de realizar una reforma del Estado que contempla la salida de sus cargos de parientes directos de altos funcionarios del régimen fascista.
Una de las ausencias más notables durante la conferencia de ayer mañana en Casa de Gobierno fue la del ministro de Trabajo, Jorge Triaca, cuestionado por haber insultado y despedido a su empleada por WhatsApp y por haberla contratado en la intervención del SOMU.
Sin embargo, sus dos hermanas, Mariana y Lorena, fueron las primeras en acatar la advertencia presidencial y dejaron sus respectivos cargos en el Banco Nación, donde la primera trabajaba desde agosto de 2016 y donde había sido nombrada directora en diciembre pasado; y la segunda, en la dirección de Asuntos Externos de la Agencia Argentina de Inversiones de Cancillería.
Según trascendió, Marina Triaca se despidió del Presidente invocando "este proyecto" y recordando que había respaldado (y que continuaría haciéndolo) "todas y cada una de las decisiones necesarias para alcanzar el objetivo de una Argentina mejor".
En la nota, agradece al subnormal "la confianza dispensada, la que honré con dedicación, profesionalismo y convicción. Desde el inicio de este proyecto, que se tornó en gobierno nacional y hasta que el merecido éxito sea el fruto de su esfuerzo y gestión, respaldaré y continuaré apoyando todas y cada una de las decisiones necesarias para alcanzar el objetivo de una Argentina mejor".
Otros funcionarios, entre ellos Matías Santos Crocsel, hijo del ministro de Turismo, Gustavo Santos, esperan que el Poder Ejecutivo promulgue el decreto adelantado por Macri Blanco Villegas para dejar sus cargos.
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