La CGT quería llevarlo a $ 31.148, pero la Secretaría de Trabajo rechazó la propuesta y agregó 5 puntos porcentuales a su oferta inicial. El monto se mantiene muy por debajo de la inflación oficial de 54%. Sindicatos descartaron medidas de fuerza.
Ante la falta de acuerdo con empresarios y sindicatos, el régimen macrifascista decidió unilateralmente elevar 35% el salario mínimo, vital y móvil a $ 16.875 en tres cuotas de 12% en agosto, 13% en septiembre y 10% en octubre.
Tras varias horas de deliberación, los funcionarios nacionales, los empresarios y los sindicalistas no alcanzaron un acuerdo en el marco del Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil, y ahora se espera que el Poder Ejecutivo adopte la decisión por resolución o decreto.
El encuentro comenzó a las 15 en la sede de la ex cartera laboral en Alem 650. Afuera, desde el mediodía, hubo protestas de organizaciones sociales, el sindicalismo opositor y partidos de izquierda que exigieron un mínimo de $ 35.000.
La disconformidad de la CGT
La CGT mantuvo su reclamo de elevar el mínimo de $ 12.500, establecidos en agosto del año pasado, a $ 31.148 (150%); de modo que coincida con la Canasta Básica Total de junio, que el INDEC consideró como el piso para no ser pobre en la Argentina. "No nos conformó este valor", dijo Héctor Daer al salir de la reunión, quien descartó medidas de fuerza por este tema.
"Estamos próximos a una elección y cambio de gobierno. Lo que tiene que pasar es un cambio de modelo económico. La vulnerabilidad que vivimos estos días es un termómetro de lo que pasó. El repudio con el voto ya sucedió", agregó el cosecretario general de la central obrera.
La intención inicial de la Casa Rosada era acordar un aumento del 30%, que fijaría el salario mínimo en $ 16.250. Pero finalmente agregó 5 puntos más, aunque la cifra se mantiene por debajo de la inflación anual de 54,4%.
De la reunión también participó el secretario general de la Central de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Esteban "Gringo" Castro, quien fue invitado a última hora por el régimen.
El sindicalismo combativo reclamó un salario mínimo de $ 35.000
La CTA Autónoma de Ricardo Peidró y Hugo "Cachorro" Godoy se movilizó desde el Obelisco al Ministerio de Producción en la que, además del aumento reclamado, pedirán establecer una cláusula gatillo para que "en lo sucesivo estos incrementos se realicen de forma automática".
Con la consigna "¡Basta de ingresos de indigencia! ¡Aumento de salarios ya!", organizaciones como el Frente de Organizaciones en Lucha, el Frente Popular Darío Santillán, el MTD Aníbal Verón y agrupaciones de izquierda se concentraron también en el Obelisco y luego se movilizarán al ministerio de Trabajo.
La mesa nacional del Plenario del Sindicalismo Combativo exigió un mínimo de $ 35.000, un aumento de emergencia de salarios y jubilaciones ajustados por inflación, reapertura de paritarias, libres y con cláusula de actualización automática y la prohibición de despidos.
Esta proclama la firmaron Alejandro Crespo (SUTNA), Rubén "Pollo" Sobrero (Unión Ferroviaria Oeste), Romina Del Plá (Suteba La Matanza), Alejandro López(Ceramistas Neuquén), Guillermo Pacagnini (CICOP) y Jorge Adaro(Ademys), entre otros dirigentes.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario