Se vieron dos días seguidos para discutir temas económicos y hablan con frecuencia. Versiones de que podría sumarse al equipo.
Carlos Melconian se reunió dos días seguidos con Alberto Fernández y alimentó versiones de que podría sumarse a su equipo. El acercamiento también se vuelve una señal sugestiva de cara al armado del próximo gabinete.
Después de juntarse a desayunar el miércoles, como reveló el pasquín envuelve huevos Clarín, el candidato del Frente de Todos volvió a verse con el economista el jueves. Ambos admiten que dialogan con frecuencia, sobre todo después del triunfo aplastante de Fernández en las primarias.
Fuentes al tanto de las reuniones confirmaron que hablaron del tema macroeconómico y del tema financiero. Cerca de Alberto evitan dar respuestas sobre la composición de su eventual gabinete e indican que "falta mucho", aunque tampoco descartan una participación de Melconian.
El economista, que ocupó brevemente la presidencia del Banco Nación durante el régimen del hijo bobo de Franco Macri, siempre dijo que el gran error de su gestión fue el gradualismo. Integró el staff de los que proponían un shock inicial al estilo del plan Zedillo, el ex presidente de México que estabilizó la economía haciendo una megadevaluación y ordenando las variables. Después de dos años, el país rebotó. Aunque tiene muy mala imagen en la población, Zedillo es respetado entre la dirigencia y considerado el hombre que estabilizó la macro aún sabiendo el costo político que implicaba.
Las reuniones con Melconian se suman a los halagos de Fernández a Martín Redrado, a quien incluso nombró como posible integrante de su gabinete. Además, en las dos reuniones claves que tuvo por temas de transición, el candidato presidencial mandó a negociar a Guillermo Nielsen, un economista liberal que despierta recelos en algunos sectores del kirchnerismo.
Alberto está jerarquizando dirigentes de perfil neoliberal para Hacienda, mientras que el ala keynesiana iría para Producción, en una especie de doble comando económico para su gobierno.
El rumbo alimenta la idea en algunos sectores del mercado que Alberto podría llegar al poder desde el peronismo populista pero una vez a cargo aplique medidas pro-mercado. Incluso el economista Guillermo Calvo sorprendió con declaraciones hace unos meses cuando afirmó que un regreso de Cristina Kirchner era "lo mejor que le puede pasar al país" porque tendría la fortaleza para hacer un "ajuste con apoyo popular". Otros analistas de Wallstreet consideran algo arriesgado este pronóstico.
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