Miguel Bomchil, tenía 34 años, era militante rentado del PRO y hacía seis años que trabajaba con Guillermo Dietrich. En lo que va del año, ascienden a 60 los muertos por intoxicación con gas en el país.
Un joven funcionario del Ministerio de Transporte de la Nación falleció ayer a la madrugada a causa de una intoxicación con monóxido de carbono. Se trata de Miguel Bomchil, de 34 años, quien era militante del PRO y colaborador hace seis años del titular de la cartera, Guillermo Dietrich.
"Es una terrible desgracia. Fue por una pérdida de gas en la casa. Era pura vida, íntegro, inteligente, inquieto, apasionado, buena persona", lo recordó Dietrich en declaraciones a la prensa.
Bomchil era asesor del Ministerio y anteriormente se había desempeñado como jefe de Gabinete de la Dirección de Transporte de la ciudad de Buenos Aires.
En lo que va del año, ascienden a 60 las muertes por inhalación de monóxido de carbono en el país. Entre las estadísticas se encuentran los fallecimientos de la esposa y uno de los hijos del senador formoseño Luis Naidenoff (UCR) y la periodista Lucía Trotz, de 42 años.
Prevención
El monóxido de carbono (CO) es altamente tóxico. Si en un ambiente se acumulan niveles elevados, su inhalación causa la muerte. Este gas se origina cuando se produce una mala combustión de otras sustancias como carbón, gas natural, nafta, madera y querosén, entre otras. Su alta peligrosidad tiene que ver también con lo que cuesta percibirlo en el ambiente dado que es invisible, inodoro y no causa irritaciones.
Es por eso que se insiste especialmente en revisar el funcionamiento de los artefactos domésticos (calefactores, cocinas, calderas, calentadores de agua, garrafas de gas envasado), que pueden producirlo si no están funcionando bien. Si hay un desperfecto en alguno de estos aparatos y a eso se suma la falta de ventilación adecuada de los ambientes, el CO puede acumularse en cantidades importantes, poniendo en riesgo la salud o la vida misma de las personas.
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