La directiva de una compañía declaró que las exigencias monetarias eran exclusivas de Claudio Uberti y desaparecieron cuando el funcionario renunció.
En la causa por las presuntas coimas viales, la directiva de una de las empresas implicadas desvinculó abiertamente a Cristina Fernández de Kirchner y a Julio De Vido. No obstante, están procesados en la causa llevada por el juez clarinista Claudio Bonadio, que tiene como arrepentido a Claudio Uberti. El funcionario es el único nombrado por todos los empresarios como el responsable de las extorsiones, aunque algunos dicen que él alegaba pedir dinero para sus superiores.
Como el resto de las empresas contratistas del Estado, Marcela Edith Sztenberg señaló que sólo Uberti fue quien le pidió coimas a su empresa entre 2003 y 2007, según consta en el expediente. Precisó que dejaron de ser extorsionados tras el despido del titular del Órgano de Control de las Concesiones Viales (OCCOVI).
La ejecutiva de Equimac declaró ante el coimero fiscal oficialista Carlos Stornelli que el funcionario tenía contacto con la compañía principalmente con el director Eduardo Herbon. “Recuerdo que Herbon se encontró alguna vez con Uberti para cumplir con sus exigencias y calmar sus reclamos, los encuentros fueron por el barrio de Palermo o por el barrio de Belgrano”, dijo en su testimonial. Alegó que le pagaban “lo menos que se podía”, lo que a esa fecha equivalía a U$S 20.000.
“Según comentaba Herbon primero entregó pesos, luego Uberti le exigió dólares y luego euros, con billetes de nominación de 500 porque ocupaban menos lugar”, detalló Sztenberg. Sin embargo, aclaró que no le constaba en qué moneda efectuó las presuntas entregas de dinero a Uberti. Tampoco pudo precisar con qué frecuencia.
Declaró que las exigencias comenzaron con la firma del contrato de concesión, en octubre de 2003, y que en marzo de 2004 “quebraron” su voluntad por la falta de aumento de las tarifas y, dijo que “debimos cumplir con las exigencias”.
Pasó desapercibido en el procesamiento de Bonadio que Sztenberg desvinculó al resto de los funcionarios que, justamente, fueron señalados por el arrepentido que todos los empresarios acusan de coimero. Resaltó que “en 2007 terminaron (los pagos) cuando por los motivos que son públicos Uberti dejó su cargo. Luego más nadie nos contactó con exigencias”.
El entonces ministro de Planificación pidió la renuncia de Uberti cuando, en 2007, se descubrió que viajó en el mismo avión en el que Antonini Wilson quiso ingresar U$S 800.000 al país. Equimac se asoció a Coarco para formar Rutas al Sur SACV, la sociedad anónima que había estado a cargo del corredor de rutas que van hacia el sur de la provincia de Buenos Aires.
Uberti demoró en entregarse en la causa que sigue Bonadio por presuntas coimas viales. Sin embargo, inmediatamente se convirtió en el primer ex funcionario en acogerse a la figura del arrepentido, luego de que el rebelde fiscal Carlos Stornelli homologara el acuerdo en agosto del año pasado.
Fuente: nota de Ezequiel Orlando para El Destape web
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