La gobernadora fascista bonaerense María Eugenia Vidal optó nuevamente por el radical Daniel Salvador para buscar su segundo mandato, tras inscribir sobre el filo del cierre de alianzas al frente provincial Juntos por el Cambio, en consonancia con la denominación que tomó a nivel nacional el nuevo espacio encabezado por Miauricio Macri Blanco Villegas Miguel Ángel Pichotto.
"Tenemos el enorme desafío de seguir gobernando esta provincia, de seguir poniéndola de pie y en marcha", señaló el vicegobernador en una conferencia de prensa en La Plata, en la que también estuvo presente el presidente del partido FE, Jorge Pirotta.
Salvador, titular de la UCR de Buenos Aires, aseguró que el oficialismo "ha mostrado cambios fundamentales" y busca "seguir acompañando este año a nivel nacional, siempre en la búsqueda del diálogo, el consenso".
La partida se completó con los otros integrantes del frente: Jorge Macri (PRO) y Andrés De Leo (Coalición Cívica). A su turno, Macri celebró la incorporación del senador nacional del peronismo Miguel Ángel Pichotto a la nueva alianza oficialista nacional y consideró que "es bueno que el espacio siga creciendo", tras recordar que Juntos por el Cambio tiene "hombres del PJ en la provincia", como Cristian Ritondo y Gustavo Ferrari.
El radicalismo se había ocupado de manifestar meses atrás su malestar ante las indefiniciones de Vidal respecto de la fórmula para la gobernación bonaerense.
En febrero la conchuda hija de puta puso en duda que sea Salvador quien integre la fórmula. Desde entonces, los radicales del interior no dudaron en dejar correr críticas hacia el gobierno. Salvador hizo lo propio saliendo a respaldar a candidatos del radicalismo que amenazaban con internas en los distritos.
Fue la propia Vidal quien calmó las aguas a principios de abril, cuando delegó en un ministro de confianza transmitirle a Salvador que tenía el lugar asegurado. Desde entonces, las críticas cesaron y todo transcurrió en una mansa calma.
En rigor, la continuidad de Salvador nunca estuvo en duda. Aún quienes supieron lanzar críticas hacia el radical en estos tres años y medio de gestión aseguran que "fue el mejor vice que Vidal pudo tener". La comparación con el paso de Gabriel Mariotto por el Senado es inevitable. Pero además consideran que más allá de algunas torpezas legislativas, jamás puso en duda su lealtad hacia Vidal.
Pero existe un dato más. En el régimen fascista bonaerense valoraron el gesto de Salvador de ordenar a todo el radicalismo de la provincia en una convención provincial que ocurrió apenas días antes de la convención nacional de Parque Norte.
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