“En mis condiciones, si doy nombres tengo una querella mañana”, aseguró el fiscal federal que tuvo en sus manos causas como Time Warp, Arribas o Panamá Papers.
El fiscal federal Federico Delgado, uno de los que ha mostrado independencia para actuar en ese fuero tan controvertido, advirtió este miércoles que existe allí persecución judicial.
En ese sentido, aseguró que en el lugar donde se desempeña se trabaja en condiciones de “debilidad estructural” mientras se investiga a personas con “capital simbólico, económico o político”.
“Siempre hubo presiones porque al poder no le gusta que lo investiguen, pero en el último tiempo se agudizaron”, señaló Delgado en declaraciones a radio Caput.
Ante la pregunta de quiénes son los que llevan a cabo esas presiones, respondió que “en mis condiciones, si doy nombres tengo una querella mañana”. Sin embrago, expresó que “nosotros investigamos el caso del juez Oyarbide, identificamos al señor Angelici, fue sobreseído y nuestra apelación no prosperó".
Delgado explicó que las causas en el fuero federal se transformaron en un arma contra el adversario político. “Los jueces arman causas penales que no tienen sustento técnico ni de hecho, pero lo hacen para disciplinar”, indicó.
Manifestó además su temor de que esta práctica se naturalice e interpeló a la dirigencia judicial: “lo más grave es el silencio, que es casi cómplice de la institución que tiene que proteger a quienes trabajan”.
Por último, el fiscal apuntó también contra la dirigencia política a la que le pidió que no permita aprietes y persecuciones.
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