El secretario General de la CTEP lo sostuvo ante el aumento incesante de precios de los alimentos y los servicios, en un proceso de ajuste severo por el acuerdo con el FMI.
El 7 de agosto próximo, Día de San Cayetano, patrono del trabajo, los movimientos sociales y sus aliados de la CGT y las CTA Autónoma y de los Trabajadores marcharán una vez más las calles porteñas al movilizarse al Obelisco por Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo.
El secretario General de la CTEP, Esteban "Gringo" Castro, referente de la CTEP, advirtió que "si tenemos que ir a los supermercados lo vamos a hacer" ante el aumento incesante de precios de los alimentos y los servicios en un proceso de ajuste severo por el acuerdo con el FMI.
Castro integra "Los Cayetanos", así llamados porque tomaron la agenda del Papa Francisco por Tierra, Techo y Trabajo, en la práctica representantes de los desplazados del mercado laboral, y junto con sus aliados de la CCC y Barrios de Pie lograron a fuerza de movilización y negociación cara a cara con el gobierno, un lugar en el espacio político y son ya una referencia ineludible en cualquier escenario de confrontación con las políticas de ajuste y expulsión de los gobiernos.
El acuerdo de las tres organizaciones sociales más grandes sellado en agosto del 2016 durante la marcha del 7 de agosto -aunque sus protagonistas se conocen de todas las batallas- sumó en los últimos años al reconocido Frente Darío Santillán y a los inquietos militantes del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), entre otros.
Castro, habitual orador de cierre de los actos que como mareas cada vez más frecuentes incursionan en la Plaza de Mayo, el Congreso o el Obelisco, es también un negociador de primera línea con el gobierno nacional en Desarrollo Social, Trabajo o Gobierno donde se desarrollan los discusiones con los funcionarios macrifascistas.
Con ellos negocian a cara de perro -siempre junto con Daniel Menéndez de Barrios de Pie y Juan Carlos Alderete de la CCC actualizaciones en el presupuesto para el salario social complementario , asignación para trabajadores de la economía popular por una ley que se votó en forma unánime en el Congreso en diciembre del 2016.
"El Grindo" grafica "eso ayuda a los ingresos que vos, vendedor ambulante o cartonero, conseguís con tu trabajo diario pero en la Argentina se terminaron las changas, no se mueve el mercado interno ¿cómo carajo hacés para llevar la comida a tu casa y darle de comer a los pibes?".
La profundidad de la crisis es tal que "cualquier acuerdo puede generar una mínima mejora pero el marco general es malísimo. Aquí necesitamos fortalecer el mercado interno, necesitamos políticas de Estado para mejorarlo. Necesitamos que el Estado desarrolle las economías regionales y la economía popular", agrega.
Para reafirmar sus dichos Castro trae a la gran aliada de los movimientos sociales, la Iglesia Católica: "están muy preocupados por el ajuste porque es más miseria y esto puede terminar en un genocidio social. Estás al lado de los pobres y los ves sufrir cada vez mas. No se puede no decir lo que está pasando".
Con varios objetivos en marcha, cinco leyes en el Congreso -de acceso a la tierra, de emergencia en adicciones, de emergencia alimentaria, de Integración Urbana y de Infraestructura Social-, las negociaciones para ingresar a la CGT y las duras discusiones con la ministra Carolina Stanley, Castro junto a sus aliados de la CCC y Barrios de Pie enfocan la marcha del 7 de agosto, Día de San Cayetano.
Ese día movilizarán por tercer año consecutivo desde Liniers, donde está la parroquia del santo patrono del trabajo y que da nombre a la coalición de organizaciones sociales, hasta el Obelisco donde realizarán una gran concentración ya no sólo bajo la histórica consigna Paz, Pan y Trabajo. Ahora es Paz, Pan, Tierra, Techo y Techo.
Hablar con Castro supone asomarse a una realidad muy dura, muy difícil en la que las injusticias y carencias, el descenso de las condiciones de vida de demasiada gente en la arrogante Argentina son una realidad creciente y por eso, la prédica en torno a la necesidad de organizar a los desocupados en un sindicato único -asunto en el que no todos los Cayetanos acuerdan- y que se integre a la CGT está al tope de la agenda.
"Nosotros buscamos mayor institucionalidad para los trabajadores de la economía popular y eso está en la CGT. Estamos frente a una nueva configuración de la clase trabajadora y por eso pensamos que tenemos que estar dentro de una sola central que para nosotros es la CGT. Con eso vamos a darle pelea a quién haya que dársela", dice convencido no sólo por la doctrina sino por la historia reciente que los Cayetanos construyeron con líderes sindicales para apoyarse mutuamente en las reivindicaciones y también -eso se ve en la calle- en infinidad de acciones.
Para el 7 de agosto esperan en el palco que estará cerca del Obelisco y mirando al sur, a los principales referentes gremiales de la Argentina pero el centro de la escena lo ocuparán los que no tienen derechos laborales.
Un tema ineludible en la entrevista con el Gringo es la marcha sobre los supermercados, como se dice "un clásico de fin de año" pero se está viendo que este año se adelantó a julio ya que algunas organizaciones sociales ante la miseria y la desesperación quieren ir a las puertas de esos negocios.
"Nosotros fuimos en el 2016 y en el 2017 y si tenemos que ir a los supermercados vamos a ir. Lo que no queremos es que se genere un estallido social que hoy sería más complejo porque hay muchos mas fierros en la calle, narcos, descontrol y por lo tanto puede haber muchos mas muertos en los sectores populares. Nosotros trabajamos para que eso no se produzca porque sabemos los efectos que eso tiene. Por eso queremos que haya una salida política a esta crisis", cierra Castro.
Fuente: nota de Alba Silva para Infonews
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