Otra encuesta ubica a Alberto en 52 puntos e indica que no habrá balotaje

El sondeo de Rouvier coincide con el último de Gustavo Córdoba. El candidato del Frente de Todos le saca casi 20 puntos a Macri Blanco Villegas.

Una nueva encuesta ubica a Alberto Fernández arriba de los 50 puntos y con casi 20 de ventaja respecto a Miauricio Macri Blanco Villegas, en una victoria contundente del Frente de Todos que descartaría la posibilidad de un balotaje.

El sondeo de Ricardo Rouvier, difundido ayer, tiene a Alberto en 52% al igual que el último de Gustavo Córdoba. Ambos marcan una diferencia contundente respecto al ex hijastro de Flavia Palmiero y también un cauto crecimiento de Roberto Lavagna respecto a las últimas mediciones, que para Rouvier tiene una intención de voto de 7,6% mientras que para Córdoba llega casi al 10%.

Rouvier observa en su último monitoreo que la fórmula de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner supera por 18 puntos a la de Macri Blanbo Villegas y Miguel Pichotto, tomando en cuenta sólo los votos positivos y realizando una proyección de los indecisos.

"Los resultados descartan la posibilidad de un balotaje y muestran que el próximo 27 de octubre se consagrará un nuevo Presidente para el país, logrando un cómodo triunfo en primera vuelta", dice el análisis de Rouvier entre sus conclusiones. La encuesta fue telefónica y se hizo a nivel nacional con 1200 entrevistas entre el 8 y el 16 de octubre.

En la misma sintonía, el sondeo realizado hace una semana por Córdoba y Asociados sobre 1200 casos en domicilios, muestra que el candidato del Frente de Todos tiene una intención de voto del 52,2 por ciento contra el 32,7 por ciento del hijo bobo de Franco Macri, que recorta unas décimas la diferencia respecto a la encuesta del mes pasado de la misma encuestadora.

En comparación, el crecimiento más significativo lo tiene Lavagna, que pasa del 6% al 9,8%. Según Córdoba, el crecimiento de Lavagna "habla de un votante que ha migrado de posiciones cercanas a Macri Blanco Villegas y que, ante la evidencia de la ausencia de chances de victoria en la primera vuelta y la radicalización del discurso macrifascista hacia la derecha, opta por votar a un candidato más cercano a su posición ideológica: ser de centro y antiperonista.