El ministro de Desarrollo Social evitó polemizar con la diva. Explicó que la respuesta a la pobreza es la generación de fuentes de empleo y destacó el carácter "dinamizador" de la tarjeta alimentaria que lanzó el Gobierno.
Daniel Arroyo, se refirió a los dichos de Susana Giménez, quien días atrás recomendó “que la gente vaya al campo” para trabajar y superar la pobreza y la falta de alimentos. “Más allá de los debates más fáciles, creo que la producción de alimentos es una salida fuerte” a la crisis, puntualizó el funcionario.
“Que el árbol no tape el bosque”, aconsejó el ministro de Desarrollo Social tomar distancia de la polémica y quitar el foco en la frase de la longeva presentadora televisiva, quien al ser consultada sobre la crisis respondió: “Que dejen de hablar de la pobreza, y si hay mucha pobreza que la gente vaya al campo. Nosotros fuimos siempre el granero del mundo y hay que enseñarle a la gente, por ejemplo, del Norte a plantar, a tener gallinas en el gallinero. Qué sé yo, cosas”.
Esos conceptos le valieron duras críticas a la ex actriz. Arroyo evitó polemizar y dijo “ser muy respetuoso” sobre la opinión de la ex diva porque “siempre escucho todos los comentarios y análisis”. No obstante, puntualizó que “más allá de los debates más fáciles, la producción de alimentos es una de las salidas fuertes de la pobreza”.
En declaraciones radiales, el ministro remarcó que “la salida de la pobreza es con trabajo”. Además, reconoció que “mucha gente que tiene planes sociales y que trabaja, es pobre" debido a la profundidad de la crisis de los últimos cuatro años. Algunas son personas “que son gasistas, plomeros y hacen changas”, ejemplificó.
“Aprendí hace tiempo que ‘el árbol no tape el bosque’, y mi tarea central es llevar adelante políticas públicas”, dijo y agregó que una de las opciones es “generar un mecanismo para que la agricultura familiar tenga escala de alimentos”.
En este sentido, explicó que la tarjeta de alimentos es un “dinamizador” de la economía, como así también “la ley de góndolas es importante en esto”. El Estado tiene que “certificar calidad y apoyar la comercialización” de esos sectores, indicó.
“El plan ‘Argentina contra el hambre’ se divide en tres grandes partes: el acceso a la canasta básica de alimentos y la buena nutrición, la producción de alimentos y un gran plan de trabajo, y desarrollo local de los productores”, concluyó.
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