Julio César "Huevo" Toresani, ex jugador de Boca Juniors y River Plate, fue encontrado muerto en la habitación en la que vivía en el predio de la Liga Santafecina de Fútbol.
El ex volante estaba desempleado desde febrero tras ser echado como director técnico del club uruguayo Rampla Juniors, y estaba alejado de su familia, luego de que su segunda mujer le impusiera una perimetral por violencia.
Dos semanas atrás, el ex futbolista había tenido un intento de suicidio, tras el que fue hospitalizado en la capital de Santa Fe. "Llegó el momento, demasiada espera", escribió el domingo en su estado de Whatsapp.
El también ex jugador de Unión y Colón de Santa Fe, recordado por su cruce discursivo con Diego Maradona en 1995 (a él estaba dirigido el famoso "lo espero en Segurola y Habana" de Diego), fue hallado ayera la mañana en su habitación del hotel que la Liga Santafecina tiene en las afueras de la capital provincial. Toresani vivía allí desde su vuelta de Uruguay, donde fue desplazado del puesto de entrenador tras pelearse con el presidente del club Carlos Oreiro. "La decisión tomada con el cuerpo técnico fue por razones extradeportivas", explicó el dirigente a los medios charrúas en febrero.
"El estaba viviendo en el predio, compartía y comía con nosotros, con la gente que está ahí. La vuelta de Uruguay fue bastante dura para él porque tenía una ilusión grande. No conseguía trabajo estable y estaba deprimido", describió la situación del ex futbolista el presidente de la Liga Santafecina, Axel Menor.
El titular de la Liga que alojó a Toresani en sus últimos describió que el domingo vieron juntos los partidos de la definición del ascenso y charlaron sobre otros partidos.
También agregó que dos amigos lo fueron a visitar alrededor de las 20. "Lo del mensaje en su estado de Whatsapp, me entero ahora", lamentó Menor respecto del texto que el ex jugador de Boca y River escribió alrededor de las 16: "Llegó el momento, demasiada espera".
Toresani estaba alejado de sus hijos y su familia. Tenía una perimetral que le impedía acercarse a la casa de su segunda esposa, que lo había denunciado por violencia de género. Según el periodista santafecino Adriel Driuzzi, dos semanas atrás, el ex jugador de Colón y Unión fue sometido a un lavaje de estómago en el hospital Santa María Cullen tras intentar suicidarse con la ingesta de alcohol y pastillas.
"El decía que había sido una locura, lo minimizaba, pero lo charlamos. Había cambiado de psicólogo y estaba con un psiquiatra que le consiguió el vicepresidente de la Liga. Le habían cambiado los medicamentos", contó Menor sobre el cuadro que atravesaba el ex futbolista.
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