Luego de rechazar el proyecto de reforma laboral que el régimen macrifascista presentó en el Congreso, dirigentes de la CGT encabezaron ayer una movilización por el centro porteño contra los tarifazos en los servicios públicos aplicados por el Gobierno.
“Parece que nos están tomando de boludos”, criticó el triunviro Juan Carlos Schmid, quien advirtió que las protestas por este tema “se van a profundizar” en los próximos días.
La manifestación que comenzó con una concentración en Diagonal Norte y Suipacha y luego continuó con una marcha hasta la sede del Ente de Regulación Eléctrica (ENRE) fue protagonizada por los gremios más críticos que integran el Consejo Directivo de la central de la calle Azopardo.
Schmid puntualizó que la de ayer al mediodía fue la primera de una serie de protestas que la CGT concretará “hasta el 22 de agosto, cuando se realice el Congreso de Normalización” para la elección de las autoridades que reemplazarán al actual triunvirato.
Por lo pronto, añadió, se le pedirá a los distintos sindicatos “que repitan medidas como esta en distinos lugares” y antició que “luego se hará un plenario de secretarios generales para ver el resto de las acciones que se puedan tomar”.
Las críticas del titular del Sindicato de Dragado y Balizamiento se dirigieron al régimen macrifascista en la figura del CEO de Energía. “Cuando Aranguren nos dice que esta es medida es para sacar a la gente de la pobreza parece que nos está tratando de boludos”, lanzó.
Los tarifazos son “una provocación, un atentado contra los bolsillos”, remarcó el dirigente y explicó que la CGT no tiene previsto entregar una demanda escrita a las autoridades, sino más bien “visibilizar el descontento de la ciudadanía” por este tema.
El jueves, la central obrera rechazó el proyecto de reforma laboral y expresó su preocupación por la "incertidumbre económica y social". Advirtió también que adoptaría medidas de rechazo a las políticas de ajuste, como las del mediodía de ayer.
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