El candidato a juez federal de Mar del Plata, impulsado por el régimen macrifascista, es impugnado por los organismos de derechos humanos, que consideran que su designación sería "un gran retroceso" para el proceso de memoria y verdad. Ahora reclaman que el pliego de Pedro Hooft sea "definitivamente descartado".
La Comisión de Acuerdos del Senado no aprobó la designación de Pedro Federico Hooft como juez federal de Mar del Plata, ya que no reunió la cantidad de asistentes suficientes para dar quórum a la sesión pautada para ayer a la mañana. Referentes de organismos de derechos humanos que expondrían los argumentos por los cuales impugnaron formalmente al candidato del Poder Ejecutivo celebraron la marcha atrás, pero reclamaron que el pliego sea "definitivamente descartado". La designación de Hooft, quien fue propuesto por el Poder Ejecutivo, implicaría "un gran retroceso para el juzgamiento de los crímenes de lesa humanidad", sostuvo Alan Iud, abogado de Abuelas de Plaza de Mayo.
“La Comisión no tiene quórum”, informó el senador Rodolfo Urtubey pasados 20 minutos del horario estipulado para el inicio de la reunión en la que los legisladores debían emitir dictamen sobre una serie de candidatos a completar cargos judiciales de diversos fueros que el Ejecutivo había enviado a la Cámara alta semanas atrás. A la ausencia que se esperaba de los representantes del bloque de Frente para la Victoria-PJ, quienes días atrás rechazaron la designación de Hooft tras reunirse con organismos de derechos humanos, se sumó la inasistencia de senadores del Bloque Justicialista y de la Unión Cívica Radical.
Fuentes parlamentarias indicaron que es improbable que la Comisión vuelva a reunirse en el transcurso del año. Los organismos de derechos humanos que impugnaron la decisión del Ejecutivo de nombrar a Hooft a cargo del Juzgado Federal número 1 de Mar del Plata vincularon la imposibilidad de reunir a los representantes necesarios para darle continuidad a la designación con su rechazo, pero encendieron la alarma: "Esperamos que el pliego sea descartado de manera definitiva, que el Poder Ejecutivo lo retire y que no quede la amenaza latente de su tratamiento no bien nos distraigamos un poco", apuntó Iud.
Eso pasó con la designación de Santiago Ulpiano Martínez como fiscal federal de Bahía Blanca. Tras la presentación formal de rechazos por parte de un abanico importante de organismos, la Comisión de Acuerdos primero no logró conformar quórum y semanas después avanzó en la designación. "Ni siquiera nos convocaron, no escucharon nuestros argumentos" y habilitaron la designación del candidato del Ejecutivo, conocido por garantizar la impunidad de represores y partícipes civiles del terrorismo de Estado, entre otras actitudes repudiadas.
A Hooft, seleccionado por el régimen fascista de Miauricio Macri Blanco Villegas para ejercer uno de los principales juzgados federales de Mar del Plata, Madres de Plaza de Mayo, Hijos, el Centro de Estudios Legales y Sociales, la Comisión Provincial por la Memoria y Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, entre otros organismos, lo rechazaron por su postura contraria al proceso de memoria, verdad y justicia que evidenció el funcionario a lo largo de los últimos años.
En sus impugnaciones insistieron en que no lo rechazan por su vínculo filiatorio con Pedro Hooft (padre), denunciado por ser partícipe y cómplice de delitos de lesa humanidad durante la última dictadura cívico militar, sino por la manera y los métodos que utilizó para defenderlo e impedir así que la investigación judicial sobre su complicidad avanzara.
Al ejercer como abogado defensor de su padre, el actual secretario judicial del distrito balneario denunció al fiscal general de Mar del Plata, Daniel Adler, a quien grabó de manera ilegal y hostigó incansablemente vía redes sociales.
El informe psicotécnico de Hooft que acompañó su postulación en el Consejo de la Magistratura calificó al marplatense de apto para ejercer el cargo, pero con “escasa adecuación al perfil requerido”. No obstante, el Consejo lo incorporó en la terna que propuso al Poder Ejecutivo junto a otros dos candidatos. Vía decreto, el hijo bobo de Franco Macri lo seleccionó a él.
“No fue consecuente con la búsqueda de verdad y justicia por los crímenes del terrorismo de Estado”, apuntó Estela de Carlotto en la impugnación que presentó en nombre de Abuelas de Plaza de Mayo y que ayer a la mañana representantes del organismo estaban dispuestos a exponer ante la Comisión de Acuerdos de avanzar la sesión. Para Abuelas, la designación de Hooft al frente del Juzgado Federal número 1 de Mar del Plata, que lleva a cabo varias investigaciones por delitos de lesa humanidad, es “un claro retroceso en el proceso de memoria, verdad y justicia”.
A principios de semana, referentes de los organismos se habían reunido con senadores del bloque del Frente para la Victoria, entre ellos la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y legisladores aliados, como Fernando "Pino" Solanas y Magdalena Odarda, para manifestar tal rechazo. “Escuchamos los planteos de los organismos, en particular la preocupación por el despliegue de actividades del Senado que es un retroceso en la política de derechos humanos”, resumió el senador Marcelo Fuentes tras el encuentro.
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