Mariel Fernández, referente local del Movimiento Evita asegura que tiene el apoyo de Máximo para enfrentar al intendente.
A pocas horas del cierre de listas, la interna del kirchnerismo en Moreno amenaza con salirse de control.
El intendente Walter Festa rechaza someterse a una primaria, mientras desde el Instituto Patria juegan con la intriga y responden que "todas las posibilidades están abiertas".
Mariel Fernández, la referente local del Movimiento Evita, ya lanzó su candidatura y asegura que tiene el aval de Máximo Kirchner para enfrentar al intendente.
La noticia cayó pésimo en el entorno de Festa, donde rechazan que se abra una interna con el argumento de que discutir candidaturas en un contexto como el que vive Moreno es "desconocer la realidad". En ese sentido, deslizan que habilitar una PASO sólo sería un signo de "torpeza política".
En este marco, en los últimos días comenzó a circular en Moreno un audio de militantes de Festa dirigido a Máximo, en el que describen el "malestar" que se vive en las filas del intendente por la "posible decisión, inentendible, de abrir internas en el distrito".
En ese mensaje, el grupo que responde a Festa se jacta de haberse quedado en el kirchnerismo hasta en los peores momentos. "A quienes pretendés darles una lista interna son los que desconocieron e intentaron derrotar en 2017 para condenar al olvido a Cristina Fernández, nuestra conducción y tu madre. No te pedimos que los castigues, sino que no los premies", dicen en referencia a la candidata del Evita y su paso por el randazzismo.
Lo cierto es que pese a que Festa siempre tuvo el mote de "camporista", no tiene una buena relación con Máximo, que esquivó cruzarse con él tanto en varias ocasiones. Hace dos meses, el hijo de la senadora tuvo un gesto muy fuerte hacia Fernández, cuando la acompañó hace dos meses a una recorrida por un centro cultural y se sacó fotos con ella al lado de los afiches que la promovían como candidata.
En Moreno algunos especulan que, al filo del cierre, terminará primando la supuesta premisa que el hijo de la ex presidenta les prometió a los intendentes: se evitarán las internas en los distritos gobernados por el peronismo.
De hecho, varios creen que maneja la intriga hasta última instancia para pedir en la negociación el diputado que podría querer meter Festa.
En el entorno de Fernández aseguran que Máximo dio indicios de que la interna está abierta incluso para otros candidatos. Desde el año pasado suena el diputado Walter Correa, aunque en Moreno creen que "nunca arrancó la campaña" y como todavía le quedan dos años de mandato no creen que juegue, pese a que en ámbitos privados sostiene que le gustaría enfrentar a Festa.
Mientras el peronismo se pelea por encabezar la boleta, sabiendo que quien resulte ganador de esa pulseada será gobierno en Moreno, el macrifascismo -con chances casi nulas de gobernar el distrito- ya eligió a Aníbal Asseff como candidato.
Pese a la definición, desde el espacio aseguraron que también hay peleas por las boletas, donde procuran hacer lugar para el espacio de Miguel Pichotto y ya empiezan a sonar algunos candidatos para la boleta de concejales, como Sebastián Yebra que entraría por Cambiemos, y Julián Signa, que entraría desde el PJ antikirchnerista.
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