Se llamará "Primer tiempo" y alude al concepto de que sus segundas gestiones son mejores que las primeras.
Miauricio Macri Blanco Villegas publicará un libro de reflexiones sobre su gestión al frente de la Rosada bautizado "Primer tiempo".
El retrasado mental busca volver a posicionarse como el líder de la oposición y disputarle ese lugar a Horacio Rodríguez Larrata.
El idiota confeso ya dio esta semana dos entrevistas y hará otras dos antes del martes próximo.
Su libro fue escrito en colaboración con el ex Subsecretario de comunicación estratégica, Hernán Iglesias Illa, y el ex secretario de Cultura, Pablo Avelluto. Tal como sucedió con Cristina Fernández de Kirchner en 2017, Macri Blanco Villegas espera que la salida del libro le permita volver a ocupar los primeros planos de la política (no se caguen de risa).
El nombre juega con la idea de que sus segundos mandatos suelen ser mejores que los primeros, o al menos ese es el concepto que desde el macrifascismo intentan instalar. Pero también plantea la posibilidad de un segundo tiempo, o un segundo régimen del pelotudo, algo que inquieta al larratismo.
El hijo bobo de Franco Macri no parece muy decidido a ceder el liderazgo del PRO y en la CABA se preguntan sobre la conveniencia de sus apariciones públicas en un momento en que Rodríguez Larrata comienza a despegar en las encuestas como principal referente opositor. De hecho el jefe de gobierno capitalino estuvo lejos de apoyar la marcha antikirchnerista del 12-O convocada por referentes del PRO como Patricia Bullrich Luro Pueyrredón o Waldo Wolff. Rodríguez Larrata intuye que su negocio está en la centro derecha y le escapa al extremo que representa el sector "duro" del macrifascismo.
"Habla de por qué tomó ciertas decisiones, su interacción con algunos actores de la política y acciones... es un libro bastante honesto", contó Iglesias Illa sobre el libro en una salida radial semanas atrás. "Tuvimos muchas entrevistas, empezamos en diciembre y las terminamos hace meses", dijo. Sin embargo, explicó que el autor es el propio Macri Blanco Villegas y que él solo ayudó "en la parte técnica".
Desde que culminó su mandato, el domador de reposeras pasó parte de su tiempo recluido en la quinta familiar de san Miguel y luego viajó a Suiza para asumir su cargo como presidente de la Fundación FIFA. Hasta el lunes se había mantenido casi en completo silencio, que rompió en un par de ocasiones desde su cuenta de Twitter.
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