viernes, 21 de agosto de 2020

Más cuidados y el alto porcentaje de infectados explican la estabilidad de casos en AMBA

“Se han incorporado con naturalidad algunas conductas como el uso de barbijo y la higiene de manos”, indicó el infectólogo Martín Hojman. A su vez, el investigador del Conicet Rodrigo Quiroga afirmó que hoy "casi todos tenemos un familiar, amigo o conocido que está internado, la pasó mal o falleció, y eso nos hace tomar dimensión del peligro".


Una conducta social de mayor cuidado, un porcentaje alto de personas que circulan que ya se infectó y la inmunidad provocada por la gran cantidad de contagios son algunas de las razones que generan un "delicado" equilibrio que permite una estabilización de nuevos casos de coronavirus en la ciudad de Buenos Aires y algunas localidad de AMBA, dijeron ayer especialistas, aunque advirtieron que “si se relajan los cuidados pueden volver a aumentar rápidamente”.

“Es difícil decir en forma absoluta por qué se está dando esta situación. Uno puede inferir algunas razones posibles como, por ejemplo, que hay una mayor conciencia de la situación y se han incorporado con más naturalidad algunas conductas como el uso de barbijo y la higiene de manos”, indicó el infectólogo Martín Hojman.

Este médico que trabaja en el Hospital Rivadavia sostuvo que "esto se puede ver en el propio hospital donde, al principio, todas las medidas de cuidado y protección generaban mucho revuelo, y ahora se realizan naturalmente; es decir que más allá de alguna foto que se pueda ver, hay una responsabilidad individual que está funcionando”.

"También puede estar pasando que la circulación del virus haya llegado a un nivel que se mantiene pero ya no encuentra tantas personas para infectar como al principio”, agregó.

No obstante, Hojman señaló que “es peligroso pensar que ‘esto ya pasó’; en ese sentido el mensaje de que la curva está ‘madura’ puede mal interpretarse como que ya pasó lo peor, pero si relajamos los comportamientos de cuidado podemos empeorar, y mucho”.

En este contexto, y aunque el número de nuevos casos diarios es alto, el infectólogo destacó que “si bien en algunos hospitales de la ciudad de Buenos Aires no hay lugar y se derivan a otros, Jujuy y localidades de otras provincias están más complicadas, el sistema sanitario a nivel país todavía está pudiendo dar respuesta frente a la pandemia”.

El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, dijo el miércoles que en la CABA, desde el 7 de agosto "cada día" hay "un promedio de casos de coronavirus menor al del día anterior", por lo que reafirmó que hay una "tendencia al descenso" de nuevos diagnósticos positivos que "se sigue sosteniendo".

“En la ciudad de Buenos Aires, el promedio de los últimos siete días ronda en unos mil casos nuevos diarios, con un descenso cercano al 13% en relación a la semana anterior y una duplicación de casos totales estimada en 53 días”, coincidió el senador de Corrientes Martín Barrionuevo, quien analiza los datos desde que comenzó la pandemia.

En la provincia de Buenos Aires, el comportamiento de la curva varía si se trata de los municipios que conforman el primer y segundo cordón del Gran Buenos Aires o del resto del territorio bonaerense.

“En el primer y segundo cordón tenemos un promedio diario de notificación cercano a los 3.800 casos, con un descenso también cercano al 13% en relación a la semana anterior”, describió Barrionuevo y alertó que “en el resto de la provincia de Buenos Aires y en el país la cantidad de casos está creciendo de manera acelerada".

En ese sentido, detalló que en la última semana San Luis tuvo un crecimiento del promedio de nuevos casos del 300% respecto de la anterior; Santiago del Estero, del 79%; Tucumán, del 85%; Salta, del 77% y La Rioja; del 174%”.

Otro indicador que a quienes analizan números les resulta positivo de la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense es que hubo un descenso leve del porcentaje de positividad (confirmados sobre pruebas realizadas).

“Si bien está en valores altísimos, en la Ciudad de Buenos Aires la positividad bajó a 35% en la semana 33 (10 a 17 de agosto) contra 48% que había llegado; en el resto del AMBA también bajó. Por ejemplo en la zona sur del conurbano está en 50% y había alcanzado el 58%; y en el resto del país está creciendo”, precisó Barrionuevo y agregó que "no obstante, si bien en AMBA se ha estabilizado, sigue siendo el principal foco de contagio en Argentina por lejos, por lo que hay que seguir cuidándose cada vez más”.

Consultado sobre las razones por las que la curva se estabilizó y en algunos casos descendió levemente, el contador señaló que "no creemos en el concepto de 'curvas maduras' como algo natural, sino que las curvas se alimentan del comportamiento social; en todo caso la sociedad ha ido encontrando mecanismos de cuidado que luego de un crecimiento de casos logró cierta estabilidad en niveles altísimos de contagio”.

“Esto es un muy delicado equilibrio del comportamiento social y en cuanto ese comportamiento se vea desbalanceado los casos pueden volver a subir; eso es lo que vemos en el resurgimiento de brotes en Europa, por ejemplo”, indicó.

Para el bioinformático de la Universidad Nacional de Córdoba e investigador del Conicet Rodrigo Quiroga, "lo más importante es que la gente se está cuidando más, que usa más barbijo, que asiste menos a reuniones en espacios cerrados, no comparte mate y se fija de guardar distancia con el otro".

"Esto tiene que ver con que cuando empieza a fallecer y a quedar internada mucha gente casi todos tenemos un familiar, amigo o conocido cercano que está internado, la pasó mal o falleció y eso nos hace tomar dimensión del peligro", apuntó.

Otra causa que consideró menos relevante pero que también incide es que "mucho del personal esencial, los trabajadores de los rubros exceptuados y los que menos se cuidaron ya tuvieron el virus, y éstos siguen siendo los que más siguen circulando; ahora bien si empiezan a circular los que hasta ahora se quedaron en sus casas, probablemente tengamos un nuevo pico de contagios".

Por último, Quiroga indicó que "aunque menos importante, puede tener alguna incidencia el efecto de la inmunidad general porque CABA y el primer cordón ya tuvieron mucha población infectada y esto relentece la velocidad de contagio sumado a los otros factores".

"Si el comportamiento cambia, si las personas se dejan de cuidar, pueden subir nuevamente los casos en forma dramática y rápida como está pasando en el resto del país", concluyó.

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