El ex hijastro de Flavia Palmiero volvió a hablar por primera vez durante la crisis por el coronavirus y tras cuatro meses de silencio. "No hay que confundir la pandemia con una herramienta para afectar la libertad de expresión, la independencia de los poderes, el funcionamiento de la Justicia o la propiedad privada", afirmó. Dijo que el país ahora "no presiona sobre Venezuela". Su rol en Juntos por el Cambio.
El hijo bobo de Franco Macri reapareció públicamente por primera vez durante la crisis por el coronavirus, y tras cuatro meses de silencio, y cargó contra el Gobierno de Alberto Fernández, del que aseguró “que ha intentado avanzar sobre las libertades”, en alusión a la “independencia de los poderes, el funcionamiento de la Justicia y la propiedad privada”.
“Estoy más que nunca. Más cerca de los argentinos que nunca. Estoy tratando de darle un espacio al gobierno que fue elegido por el 48% de los argentinos para que ponga en juego lo que ellos piensan, sus propuestas, sus soluciones. Solamente (estoy) intentando levantar la mano y decir ‘cuidado, no avancen sobre nuestras libertades, hagan las cosas sobre lo que es el marco institucional'”, dijo Macri Blanco Blanvo Villegas entrevistado por el periodista ultraliberal y derechoso Álvaro Vargas Llosa para el ciclo “La otra mirada de Latinoamérica”.
Son las primeras declaraciones del fundador del PRO desde que la pandemia se apoderó de la agenda pública. Su última exposición había sido en los primeros días de marzo, en un ciclo junto a otros líderes políticos, en Guatemala, en el que aprovechó para cargar contra el populismo: “Es más peligroso que el coronavirus”, dijo en aquel momento. Después tuvo algunas apariciones esporádicas pero solo a través de su cuenta de Twitter, referidas a cuestiones puntuales.
“Lamentablemente hemos visto un gobierno que ha intentado en la pandemia avanzar sobre esas libertades. (Esto) Ha generado una reacción activa y fuerte de la sociedad, que se ha movilizado para expresarse en contra de estos abusos y avances. La oposición también está consolidada en la defensa de estas libertades”, remarcó el idiota confeso.
Al respecto, advirtió que “no hay que confundir la pandemia con una herramienta para afectar nuestras libertades, empezando con la libertad de expresión, la independencia de los poderes, el funcionamiento de la Justicia o la propiedad privada”.
El espiador serial dedicó además algunos minutos de la charla con el periodista y escritor, hijo del ultraderechista premio Nobel Mario Vargas Llosa, para referirse a la cuarentena, que ya lleva más de cien días. Posicionado en el llamado “sector duro” de Juntos por el Cambio, el pelotudo hijo de puta es crítico de la gestión de la crisis sanitaria por parte del Frente de Todos, según había trascendido desde su entorno. Ahora se refirió al tema por primera vez.
“Tiene que haber un equilibrio entre la prevención sanitaria y la salud mental y laboral de la gente. No hay que dejarse llevar por el miedo y la intuición para tomar decisiones en momentos como estos, sino por los datos”, subrayó y agregó que “en este tipo de crisis es donde ves los países que tienen un Estado eficiente, transparente, gobiernos que trabajan como corresponde, que reaccionan rápidamente para testear, para prevenir, para armar el sistema de salud. Y ves los que no, los que están, en forma anárquica, como dando manotazos”.
Sobre su rol en la política argentina de cara al futuro, el retrasado mental dio a entender que seguirá activo y liderando Juntos por el Cambio: “Tengo un compromiso absoluto con mi país. Amo a mi país, es mi país y soy un ferviente defensor de las libertades, de la capacidad de elegir de la gente. En esa batalla yo estoy, estoy comprometido”.
“Mi primera tarea hoy es fortalecer la unidad de Juntos por el Cambio, fortalecer todos los liderazgos que están surgiendo, que el espacio crezca a partir del volumen de sus dirigentes. Esa es mi principal tarea. Seguiré tratando de ayudar a que esos talentos crezcan, que tengamos muchos líderes capaces de defender nuestras banderas”, adelantó.
En los últimos días, el PRO se trenzó en una dura disputa interna tras el comunicado de la coalición opositora del fin de semana sobre el asesinato de Fabián Gutiérrez, el ex secretario de Cristina Fernández de Kirchner, en El Calafate. Fue un capítulo más en la discusión puertas adentro entre el ala “moderada” y la “dura”, que representa Patricia Bullrich Luro Pueyrredón, alineada con el ex mandatario. Antes de ayer, se resolvió en ese sentido la creación de una mesa ejecutiva que contiene a todos los sectores.
Asimismo, Macri Blanco Villegas se declaró “muy optimista” para el mediano y largo plazo de la Argentina y de todo Latinoamérica, aunque aclaró que “en el corto plazo se van a vivir situaciones muy difíciles”.
“Los ciudadanos hoy tienen valentía de expresarse sin miedo, de defender sus oportunidades, de creer en la cultura del trabajo y en la superación personal”, sostuvo.
El subnormal no dejó pasar la entrevista para volver a advertir sobre la situación de la dictadura de Venezuela, en la que machacó en forma constante durante sus cuatro años de gobierno. “A veces en la vida a uno no le gusta tener razón. Lo dije hace muchos años, cuando estaba (Hugo) Chávez, que esto era una dictadura. El tiempo lamentablemente me ha dado la razón. Mi solidaridad con los queridos venezolanos. No se puede convivir con ningún intento de afectar nuestras libertades. Tenemos que seguir manteniendo la presión hasta que en el Ejército venezolano surja una decisión de terminar con este proceso de destrucción, y para eso tenemos que estar unidos, y manteniendo la presión muy alta”, subrayó.
“Mi país, Argentina, no lo está haciendo, se retira permanentemente de las posiciones de aumentar el nivel de sanciones a Venezuela. Eso me duele mucho. Es la realidad con la cual estamos conviviendo hoy a partir del nuevo gobierno. Tenemos que seguir unidos en el reclamo por la democracia en todo el continente. No hay que abandonar”, agregó.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario