domingo, 8 de julio de 2018

En el PRO por ahora observa cómo se pelean los otros dos socios

Mientras referentes radicales y Elisa Carrió se cruzan por las redes sociales, en el régimen ultiman detalles del traspaso de empresas de servicios públicos a las administraciones porteña y bonaerense.


Las tensiones, antes subterráneas, el viernes se hicieron visibles entre los socios de la coalición parlamentaria -como gustan decir referentes de las distintas partes en cuestión- de Cambiemos: el cruce entre la cúpula del radicalismo, referenciada en Alfredo Cornejo, y la desquiciada Elisa Carrió puso en evidencia una disputa de poder dentro del espacio que viene desde las discusiones por tarifas, por mayores lugares de representación en las mesas políticas surgidas al calor de la crisis económica sin que aún estén en pugna las futuras candidaturas distritales para los comicios de 2019.

La "broma" de la líder de la Coalición Cínica ("los radicales van a hacer lo que le digamos", dirigiéndose al diputado Atilio Benedetti presente en el auditorio) derivó en un duro comunicado de la UCR nacional que no compró la teoría de un chascarrillo.

"La respuesta no puede ser ‘ya sabemos cómo es Carrió’. La respuesta es respetar, de una buena vez, a los socios de la coalición de gobierno que ella pretende destruir. Que nos diga Carrió, realmente, cuánto aporta hoy a Cambiemos y a las políticas del Gobierno Nacional.Seguramente sea menos que las propinas que deja", dispararon desde la UCR, haciendo alusión al furcio de entresemana de la legisladora. La chaqueña rápidamente utilizó su cuenta de Twitter para azuzar al titular del partido, el gobernador mendocino Alfredo Cornejo, al que acusó de desconocer esa broma suya que repite "desde hace 20 años" porque en ese momento estaba "en el kirchnerismo" al hacer alusión a la antigua alianza del cobismo con el FPV.

El mismo viernes, por la tarde, el diputado radical Mario Negri y "jefe" de la chaqueña, por ser el titular del interbloque Cambiemos en la cámara baja, la respaldó, dijo que fue una "broma" y que "en un contexto difícil para el país, debemos cuidar #Cambiemos. La sociedad nos lo agradece".

Carrió le agradeció de manera virtual al cordobés en una parada hacia su excursión a la provincia mediterránea donde en las próximas horas se reunirá con empresarios pymes y productores. La semana próxima, en su entorno, aseguran que mantendrá un encuentro con el propio Negri en esa provincia y otros dirigentes locales.

En el Ejecutivo anteanoche intentaban restarle dramatismo al cruce público entre dos de los máximos referentes de la coalición. "No hay preocupación", decían. En la UCR aseguraron que "la orden del comunicado la dio Cornejo".

Bien temprano distintos referentes PRO, como Jorge Macri, se solidarizaron con la chaqueña por el escrache que sufrió el Instituto Hannah Arendt -think tank de la Coalición Cínica- por parte de militantes de izquierda.

Lo cierto es que las tensiones entre los radicales y la enferma mental vienen desde el comienzo de la administración. Antes de ayer cerca de la blonda diputada admitían que su vínculo con Ernesto Sanz, también cofundador de la alianza de derecha Cambiemos, tiene "idas y vueltas" y que con Cornejo "no se conoce"’ ya que nunca coincidieron en las mesas políticas de la alianza que se han celebrado en Casa Rosada. Las diferencias vienen incluso con el Ejecutivo en el tratamiento por el aumento de las tarifas y también por la relación con el peronismo vista la discusión que se viene por el Presupuesto 2019. La diputada ha deslizado que no vería mal prorrogar el presupuesto vigente sino hay acuerdo con la oposición en el Congreso para sancionar la ley de leyes. Eso mismo hizo el kirchnerismo en 2010 ante una oposición por entonces envalentonada.

En el ministerio del Interior no están de acuerdo con esa postura y vienen preparando el terreno con los gobernadores para discutir la futura ley de gastos -y una eventual cofinanciación de las obras públicas- y esperan convocar a los referentes de los principales bloques parlamentarios para la misma negociación.

Mientras tanto, en el Ejecutivo negocian con los jefes distritales aliados en la ciudad y la provincia de Buenos Aires, el traspaso de las concesionarias eléctricas EDENOR y EDESUR y también de parte de los subsidios del sistema de transporte de pasajeros -trenes y colectivos- que regula la Nación. Se trata, en última instancia, de un gesto hacia el peronismo dialoguista que venía pidiendo que el estado federal no privilegie a los distritos más poderosos del país en detrimento del interior.

El viernes la Residencia de Olivos fue escenario de un almuerzo y una sobremesa larga, entre Marcos Peña Braun Menéndez, Rogelio Frigerio y el alcalde porteño, Horacio Rodríguez Larrata y su vicejefe Diego Santilli, Vidal y su jefe de gabinete, Federico Salvai, Nicolás Dujovne (Hacienda), entre otros, en el que se intentó acercar posiciones.

"Hay algunos avances. Pero habrá reunión la semana próxima y seguiremos negociando, el monto de los subsidios más que un traspaso", dijo una fuente consultada.

Fuente: nota de Emiliano Russo para Diario Popular

No hay comentarios.:

Publicar un comentario