La distribución de los contagios es pareja: el 50% de los casos corresponden a mujeres y el otro 50% a hombres. La edad promedio de los contagiados se mantiene en 43 años y la media de las víctimas fatales es de 75.

De los nuevos contagiados 49 son de la ciudad autónoma de Buenos Aires, 38 de la provincia de Buenos Aires, 6 de Río Negro, 5 de Chaco, 2 de Entre Ríos,2 de Tierra del Fuego y 1 de Córdoba.

Del total de esos casos, 920 (19,2%) son importados, 2.076 (43,4%) son contactos estrechos de casos confirmados, 1.314 (27,5%) son casos de circulación comunitaria y el resto se encuentra en investigación epidemiológica.






El sábado se registró la primera muerte en la Villa 31 del barrio porteño de Retiro: una mujer jubilada de 84 años, madre de la primera contagiada en ese asentamiento, una mujer de 43 años que fue dada de alta hace apenas dos días. La alta densidad de población concentrada y las particulares condiciones ambientales y habitacionales de los asentamientos provocan especial preocupación por el avance de la pandemia en estos barrios.

En el reporte se brindó, además, un panorama de los testeos que se realizan en este momento en la Argentina. En total se hicieron 65.813 tests de diagnóstico en todo el país, lo que equivale a 1.450,4 muestras por millón de habitantes. El número de casos descartados (por laboratorio y por criterio clínico/ epidemiológico) hasta ayer es de 50.779.

El subsecretario de Estrategias Sanitarias, Alejandro Costa, señaló que las provincias de Formosa y Catamarca continúan sin reportar casos positivos, lo que hace un total de 22 provincias afectadas por la pandemia. San Juan, La Pampa y Chubut son las únicas provincias que presentan casos únicamente importados y Jujuy, La Pampa, San Juan y San Luis no presentaron nuevos positivos en los últimos 14 días.




Por otra parte, ayer al mediodía el ministro de Salud, Ginés González García, dijo que “la pandemia la tenemos y la vamos a seguir teniendo. Lo que podemos hacer es tratar de controlarla. Y eso estamos haciendo”.

Además, aseguró tener la “certeza” de que Argentina “no vivirá el horror que han pasado otros países”, en referencia la cantidad de contagiados y muertes que han tenido Italia, España y Estados Unidos. El ministro afirmó que “no estamos ni aproximados a esas situaciones” y ratificó que “el impacto de la pandemia es menor que en otros lugares, pero el impacto existe y es real”

Además, sostuvo que el objetivo del gobierno “es manejar la pandemia y, sobre todo, los casos de coronavirus, para que ningún argentino se quede sin tener una atención correcta”.